El Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Toledo celebró este fin de semana la festividad de su patrón, San José. Más de una treintena de colegiados, colegiadas y sus familias participaron en la tradicional comida de hermandad que tuvo lugar en la finca La Retama, en Sonseca, en la que se homenajearon a los colegiados con 25 años de trayectoria profesional. Así, el presidente del COIIM-Toledo, Marcelino Casas, entregó una placa conmemorativa a Miguel Ángel Pinto y José Agustín Cruelles, a quienes agradeció su trabajo, esfuerzo e implicación con la ingeniería industrial. Previamente, todos los participantes visitaron el yacimiento arqueológico visigodo de Los Hitos, en Arisgotas.