Este viernes es 1 de septiembre, san Gil, y eso significa que se abren de nuevo los centros educativos para la incorporación de maestros y profesores (a los estudiantes todavía les quedarán unos días más de vacaciones para volver a las aulas). En concreto, serán 33.072 los docentes con los que contará el sistema educativo castellano-manchego para este curso 2023-24. El dato lo ha dado hoy el consejero de Educación, Amador Pastor, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno. «Son los docentes necesarios», apostilló.
Esta cifra engloban profesores funcionarios e interinos, de todos los centros sostenidos con fondos públicos y no solo de las etapas obligatorias, sino que también se cuenta Bachillerato, Formación Profesional o las conocidas como las enseñanzas de régimen especial, en las que entran escuelas de idiomas, conservatorios o educación de adultos.
La cifra de docentes para este curso supone un aumento del cupo de 319 plazas en comparación con el curso anterior. El dato ya lo dio el lunes Emiliano García-Page en una entrevista, pero el consejero de Educación ha detallado hoy por qué se produce este incremento de profesorado. Y no solo hay un motivo.
Por un lado, la Consejería de Educación dará un paso más en la reducción de las ratios, es decir, en el número de alumnos que puede haber por aula. Para este curso se extiende el ratio máximo de 22 niños por aula en Infantil a los grupos de cuatro años (el pasado curso ya se puso en vigor para los de tres años). También se baja a 32 como tope la ratio de alumnos de Bachillerato por clase. Esta reducción del número de estudiantes por aula obliga consecuentemente a tener más docentes.
También se incrementa el profesorado por la apuesta por la Formación Profesional, con nuevos ciclos y proyectos de aulas de emprendimiento y de tecnología aplicada. Otra de las causas es la puesta en marcha de centros de nueva creación o la ampliación de aquellos que se han abierto en los últimos años y que «van aumentando el número de niveles y de etapas». Por último, también mencionó que el año pasado se activó el primer curso de la rama de Bachillerato General en 49 institutos y que este año toca consolidarlo con el segundo curso.
Queda un nombramiento masivo de interinos. A lo largo del verano la Consejería ya ha llamado a miles de interinos para cubrir todas esas vacantes para el arranque del curso. El consejero aclaró que todavía queda realizar un «nombramiento masivo» de interinos antes de que empiecen las clases. «Hasta que no se aperturen los centros, no sabemos las realidades de bajas, sustituciones o excedencias del profesorado», explicó Pastor. Para todas esas circunstancias la Consejería de Educación llama a los interinos.
Pastor subrayó que en el ámbito de Infantil y Primaria, la tasa de interinidad en Castilla-La Mancha está por debajo de la media nacional. En el caso de Secundaria no es así, pero el consejero apuntó que con la periodicidad en las convocatorias de oposiciones «nos estamos aproximando al objetivo de reducirlas paulatinamente».