Los delincuentes calculan los riesgos y las ganancias consiguientes de sus fechorías. La evaluación positiva anima a la comisión de un delito. Pero, en ocasiones, la asunción del riesgo queda lejos del beneficio, como ha ocurrido en La Mata, que celebra desde hoy San Ildefonso. El Ayuntamiento denuncia un robo insólito. El autor trepó por un edificio para llegar al tejado; así sustrajo tubos de cobre de dos aparatos de climatización: un exiguo botín.

Así lo explicó a este diario el alcalde, Indalecio Ferrero, quien detalló que el autor desarmó el día 16 dos compresores de la Casa de la Cultura para obtener las piezas de cobre. «Tiene poca valía», detallaba, pendiente del presupuesto de un profesional para el arreglo de la avería y presentar así la denuncia en la Guardia Civil.

«Los desperfectos y las reposiciones en los diferentes edificios municipales se hacen con dinero que es de todos los ciudadanos», resaltó el gobierno local en un mensaje a los 900 empadronados.

El autor sí se cuidó de no hacer saltar las alarmas porque el delito se cometió por fuera de las dependencias en un municipio con 12 cámaras de vigilancia. La Mata complicó la sustracción de cable en las farolas con un nuevo sistema, después de un robo en el alumbrado, pero resultaba imposible predecir una escalada de metros para alcanzar el tejado del edificio público.