Podría empezar esta columna, la última de la temporada, de muchas maneras… desde el final del cuento que dejamos en incógnita la semana pasada, hasta el no ascenso final o un resumen de todo lo acontecido. Pero hoy trataré de llevaros por otros derroteros.
Por los caminos de la esperanza, la ilusión y, por qué no también decirlo, por los caminos de hacernos conscientes de la suerte que tenemos en Toledo.
En el plano futbolístico, en el segundo partido del final por el ascenso a Segunda Federación al CD Toledo no le dio ante un rival superior en todos los planos y ante eso, podemos tirar de mil tópicos del fútbol, que si le faltó gasolina, que si las piernas pesan, que si llegaban muy justitos, que si había que haber hecho los deberes antes… pero creo que lo justo es felicitar al ganador. Esto es el deporte.
Y una vez hecho esto, toca pararse y analizar lo ocurrido, no solo el domingo, si no los últimos dos meses, y mirar en ese espejo de los recuerdos y la memoria para conseguir entenderlo y repetirlo en una versión todavía mejorada.
Repetir la esperanza de una ciudad que, desde los más jóvenes que nunca vieron ni vivieron aquella época dorada, sienten un escudo y unos colores, hasta aquellos que ansiamos volver a sentirlo.
Mantener la espectacular ilusión generada de forma constante, inequívoca e inquebrantable, porque el fútbol es sentimiento, es pasión, pero, sobre todo, el fútbol son los sueños y el afán de superación que están por llegar.
Y así llegamos a la suerte, algo que no creo que exista en lo deportivo, pero que creo que el aficionado del CD Toledo tiene la obligación de sentir, cerca del centenario, la fortuna de poder seguir un equipo gracias al respaldo, la apuesta y la confianza de su propiedad que lo mantiene más vivo que nunca.
Y sí, el CD Toledo está en Tercera División, pero a pesar de sus son 96 años de historia, hoy por hoy es como un niño pequeño que va creciendo y aprendiendo, con mucho recorrido por delante y todo el derecho del mundo a equivocarse, pero que, con lo conseguido en el plano social este año y la mejora en su gestión deportiva, seguirá haciendo historia esté donde esté, y dando a todos los aficionados verdiblancos experiencias únicas e inolvidables.