El pabellón de Cobisa perdió justo su robustez cuando menos lo indicaba. El equipo toledano se ha colocado por detrás en la primera eliminatoria de los 'playoff' de ascenso a Segunda División después de caer frente a un Rivas Futsal más experimentado que golpeó en los momentos clave del encuentro. Y, sobre todo, se aprovechó bien de los pocos errores cometidos por el cuadro de Quique Soto.

Y es que, la magia de la instalación sí que, no solo se repitió, sino que se multiplicó cuando más hacía falta. El cuadro local dominó durante los primeros minutos alentado por una grada repleta hasta el techo. Sin volverse loco, el Cobisa Futsal probó a Merino desde todas las distancias, especialmente desde lejos.

Nadie quería poner más de lo necesario para no verse por detrás en el marcador, pero el Rivas Futsal acabó por tener sus momentos, y Dudu también tuvo que actuar para ahuyentar los problemas. Sin embargo, fueron los toledanos los que acumularon más llegadas, con posesiones larguísimas, intentando hacer largo el partido y la eliminatoria.

el cuadro local jugó con un público completamente entregado

Tras el ¡uy! De Peces a falta de seis minutos y pico para el final, le sucedieron hasta cuatro cinco jugadas a balón parado, entre saques de esquina y de banda. Sin embargo, en una acción que parecía inofensiva, Pablo Villaseñor probó desde lejos a Dudu, que no supo agarrar la pelota tras pegar en el palo. Fue el 0-1.

A todas luces parecía injusto, pero había que asumirlo. Fer se plantó solo ante Merino, pero el portero agrandó de nuevo su figura. Hizo un partidazo. Es verdad que arrebato del Cobisa sí que hizo justicia a lo que se estaba viendo sobre l parqué, porque, en una jugada coral, David García acabó poniendo el balón en la escuadra, para empatar el choque. De ahí al final del primer tiempo, Mario García tuvo otra oportunidad con un lanzamiento exterior, pero ahí estuvo Merino para evitar el segundo.

Con las tablas en el marcador, ninguno de los dos conjuntos expuso más de lo necesario durante el primer tramo del segundo periodo. Es verdad que el Rivas Futsal estuvo más atento para rentabilizar los fallos locales, y Martín provocó el silencio en el pabellón con un tiro seco que dio en el larguero.

Fer probó suerte de nuevo en una acción individual. Quizás volvió a dominar la escuadra aurirroja, pero el rival supo jugar muy bien con el reloj y el marcador, y se mostró siempre con mucho peligro. Aun así, nadie podía romper ese equilibrio del que tanto se había hablado durante la semana. Solo Martón, en el minuto 32, lo logró. Y porque Jota se lio al sacar la pelota en su área. Le brindó el 1-2.

El talaverano se quedó planchado, pero estaba convencido de poder enmendar su error. Y lo consiguió. No habían pasado dos minutos cuando le llegó la pelota rechazada tras un córner, y, desde fuera del área, se sacó un zurdazo que anuló a Merino. En el tramo final, el encuentro rompió un poco ese ritmo lento, sin acelerones innecesarios. Los porteros estuvieron atentos.

Ya en el último minuto y medio, el Rivas Futsal puso encima de la pista su experiencia, con lesiones casuales. Además, vio cierta debilidad física en un Cobisa Futsal venido a menos, pero que buscó con orgullo la portería. Kiki, en el segundo palo, convirtió una acción colectiva del equipo de David Madrid para ponerse por delante en la eliminatoria. Quedaban solo 42 segundos, así que no hubo tiempo para subsanar los daños. Hay que ganar por dos goles o más en Madrid para seguir adelante.