Unas 38.000 familias se han inscrito como participantes en la iniciativa del Banco de Libros en la región, un nuevo sistema de préstamo de libros de texto y otros materiales curriculares reutilizables dirigido al alumnado de enseñanzas obligatorias y puesto en marcha desde el Gobierno regional.

El consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, realizó ayer en Talavera una primera valoración «altamente positiva» ante el elevado número de solicitudes contabilizadas en tan solo una semana, aún sin finalizar el plazo para su inscripción. Se trata de una nueva medida educativa que beneficiará a la economía de las familias, especialmente dañada al inicio del curso escolar, además de ecológica, porque ayuda en la reutilización de libros.

Cabe destacar que esta iniciativa se pone en marcha desde tercero de Primaria hasta Bachillerato de centros públicos y aquellos centros concertados que hayan solicitado adherirse al sistema. La participación del alumnado es voluntaria y requiere de la entrega de un lote de libros completo del curso que haya finalizado, o de una cuantía económico en su ausencia, y de un compromiso de aceptación de sus condiciones.

El consejero confirmó que en estos días se están realizando los depósitos de los ejemplares utilizados «porque es la filosofía del banco de libros prestados, un sistema de préstamo gratuidad durante los siguientes cursos. El consejero subrayó que ha sido «todo un acierto» la incorporación también la etapa de Bachillerato, ya que en un principio estaba dimensionado hasta la ESO.

Las familias interesadas pero que no conozcan aún de manera exacta el funcionamiento de esta nueva medida, pueden informarse en el Portal de Educación de la Junta de Comunidades, o en los propios centros educativos, «donde se puede conocer fácilmente cuál es el funcionamiento, cuál es la operatividad y sobre todo la ventaja, que es una apuesta por la sostenibilidad y el acompañamiento a las familias en el coste que supone el inicio del curso y sobre todo también inculcar indirectamente a los niños y niñas, al alumnado en general, el buen uso y empleo de los materiales curriculares» es decir, dejar el material en unas condiciones óptimas para que después puedan ser reutilizables.

En este sentido, el consejero de Educación agradeció a la comunidad educativa, docentes, equipos directivos y Ampas la colaboración para que este programa salga adelante. «El éxito de este programa es la fortaleza que demostramos como comunidad educativa y sobre todo lo que decimos que el trabajo compartido siempre será mucho menor que si lo afrontamos en solitario».