Uno de los informes incluidos en la tramitación de la ampliación del polígono industrial, fechado el pasado mes de julio, aseguraba que el riesgo de inundaciones provocadas por un desbordamiento del arroyo Ramabujas era «baja o nula». Dos meses después, la fuerza del agua que discurrió por este arroyo demostró su capacidad destructora causando pérdidas de decenas de millones en empresas como Unauto, cuya flota de autobuses quedó prácticamente inservible al inundarse por completo sus cocheras.
Sin embargo, la ampliación del polígono industrial no parece estar cuestionada. Así lo confirmaba ayer el alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez, que explicaba que los terrenos incluidos en la esperada ampliación del suelo industrial de la capital regional «están lejos del cauce y del canal del arroyo Ramabujas. «Me llama la atención que se trate de unir las consecuencias de la DANA con la ampliación del polígono», explicaba Velázquez, que recordaba que en la DANA de 2021 está zona del área industrial de Toledo no se vio afectada por la riada,
«Los daños que produjo la riada en septiembre de este año y que no se produjeron en 2021 se derivan porque hubo un colapso en el tramo final de la TO-23», explicaba Velázquez, que insistió en que la ampliación del polígono industrial no se vería afectada por el cauce del arroyo Ramabujas tal y como ya ha ocurrido en la actual zona industrial. No obstante, el alcalde aseguró que el equipo de Gobierno «revisará con los técnicos cuáles han sido las consideraciones que se han tenido en cuenta» en los informes incluidos en la tramitación de esta modificación puntual del Plan General.