El calendario presiona ya a contrarreloj y la Concejalía de Planeamiento ha decidido no esperar más, tomar la iniciativa y llevar a comisión hoy la ordenanza de viviendas turísticas para que el Pleno refrende su aprobación inicial. Es la segunda vez que se incluye la modificación puntual número 32 del Plan General de Toledo relativa a la regulación del uso extrahotelero, ya que se introdujo en una comisión de finales de julio, pero se retiró a la espera de estudiar los pasos normativos a nivel nacional sobre este tipo de alojamientos.
Marzo se plantea como fecha tope de caducidad de la moratoria que permite al Ayuntamiento de Toledo suspender las licencias de viviendas y pisos de uso turístico, con lo que los técnicos han elaborado un borrador con novedades importantes respecto al interior. La más llamativa, sin duda, es el porcentaje máximo que se establecerá para impedir que una o más zonas del Casco Histórico se saturen con estos usos extrahoteleros y evitar desequilibrios en el tejido urbano.
En concreto, en este nuevo texto que recoge buena parte del que se planteó en la anterior legislatura por parte del PSOE, se introduce una gran novedad que «evitará la proliferación descontrolada de aquellos usos de la vivienda que la alejen de su función residencial», con lo que se establece «un grado de saturación del 12% en todas las áreas». De esta forma, se rebaja un 8% respecto al anterior borrador, que el actual equipo de Gobierno veía exagerado.
La comisión de Planeamiento se celebra hoy en el Ayuntamiento - Foto: David PérezEn este empeño, el concejal de Planeamiento, Florentino Delgado, ha tomado la iniciativa con el objetivo puesto en ser «rigurosos y certeros» y conseguir un buen equilibrio entre la actividad residencial y la turística en el Casco. En principio, veía con buenos ojos limitar a un 10% las viviendas turísticas por área censal en el Casco. Si bien, finalmente el porcentaje propuesto aumenta dos puntos buscando «flexibilidad» por parte de la administración municipal.
En esta línea, ese 12% de límite por área no tiene por qué ser inamovible porque el borrador deja caer la posibilidad de actualización si fuera necesario, según el artículo 12 de la futura ordenanza. El texto de este artículo se ha completado partiendo de las alegaciones de la Federación Empresarial Toledana (Fedeto) y de la Federación de Asociaciones de Vecinos 'El Ciudadano', que solicitaron una rebaja del índice de saturación conforme a la ordenanza que planteó el PSOE en febrero de 2023.
No obstante, tampoco se podrán hacer uso extrahotelero en viviendas de uso turístico o apartamentos que mantengan la calificación de protección pública mientras ésta esté vigente, ni en edificios residenciales del Casco «que hayan recibido subvención por aplicación de la ordenanza de ayudas a la rehabilitación de viviendas durante el plazo establecido en la misma». Dos condicionantes que ya figuraban en el borrador anterior.
Por otra parte, el Ayuntamiento ha rechazado buena parte de las alegaciones formalizadas por Apturcam (Asociación de propietarios y gestores de apartamentos y viviendas de uso turístico), que proponía un porcentaje diferenciado para viviendas de uso turístico -aquellas unidades de alojamiento sobre inmuebles de uso residencial-, y para apartamentos turísticos -se ubican en inmuebles de uso terciario o comercial y pueden prestar servicios a los arrendatarios-. El colectivo ve razonable un índice de saturación del 20% para viviendas turísticas, pero cree más acertado que en pisos turísticos se aplique en función «del número de unidades de alojamiento en las que se puede implantar esta modalidad».
En cambio, la respuesta de la administración apunta que estos dos tipos de modalidad de uso extrahotelero deben llevar el mismo porcentaje porque la ordenanza «permite la implantación de AT en inmuebles que tengan reconocido el uso residencial o el uso terciario».
Saturación. Los técnicos municipales han tomado como referencia unos cálculos previos para establecer ese porcentaje que la administración ve razonable. En este caso, el mapa que incluye el borrador de la ordenanza, que también figuraba en el proyecto del PSOE, avisa de que en varias zonas del Casco, dividido en siete áreas censales, rozan ya el 12%.
Los datos provienen de un informe que data de 2022 y concluye que Toledo capital concentra el 47% de viviendas turísticas de la provincia, con un total de 531, con que se traduce en más de 2.300 plazas en apartamentos y viviendas de uso turístico. Si bien, la cifra hay que tomarla con cierta prudencia porque hay parque de viviendas de uso extrahotelero en el Casco con actividad de manera clandesitina y continúan anunciándose en web de alojamientos.
En este caso, un total de 23 calles del Casco concentran el 41,7% del total de viviendas de uso turístico de toda la ciudad. El resto de Toledo no ofrece problemas, pero el Casco sí, como indica el hecho de que en un 1,27 kilómetros cuadrados que corresponden al Casco, es decir el 0,55 % de todo el término municipal, congrega el 88% de las viviendas de uso extrahotelero.
La división en distritos censales ya creó polémica en la anterior legislatura, puesto que la oposición afeó al PSOE que se anunciara la ordenanza 48 horas de la comisión de Urbanismo y se estableciese ese reparto del Casco porque era una medida que se toma en consideración en los procesos electorales.
Si bien, a los técnicos municipales les ha servido para situar y analizar la cantidad de este tipo de viviendas que confirman una saturación importante en la zona de Pozo Amargo, la calle con mayor densidad, Santa Úrsula, Nuncio Viejo, o las Bulas. En estas calles, el índice de saturación se encuentra ya en un 11,4%. Por contra, las zonas como la Antequeruela y otras más cercanas a extramuros presentan muy poca concentración de viviendas y apartamentos turísticos.
La comisión. La oposición ha recibido hoy por la mañana el borrador de la ordenanza, a menos de 24 horas de la celebración de la comisión de Planeamiento. Un hecho que puede llegar a trastocar el proceso de tramitación. En este caso, IU-Podemos pedirá más tiempo para estudiar un texto fundamental para el futuro del Casco.
En caso de que el asunto se quede encima de la mesa, será necesario llevarlo a la siguiente comisión de Planeamiento. Pero, si finalmente pasa la comisión, el Pleno terminará aprobando inicialmente esta ordenanza, para su posterior envío a la Junta, que también debe aprobar la nueva normativa.