El FS Talavera Aurge Energía puede conseguir el próximo sábado el ascenso directo a Tercera División. Es el momento soñado por toda la familia del club y, además, en el Primero de Mayo donde el equipo recibirá, a partir de las 17,30 horas, al Sierra de San Vicente.
Y es que todo se precipitó este fin de semana con la derrota del segundo, VivoCuenca, y la victoria de los talaveranos en la pista del Aceites Moral Oro B por 1-2.
Fue, en palabras del entrenador, Álvaro Fernández, «un partido muy competido». Admitió que «empezamos el encuentro bastante mal y en los primeros minutos fuimos inferiores a ellos»; precisamente el conjunto local se fue al descanso con ventaja por 1-0 que «se ha quedado corto».
A partir del minuto 25, «empezamos a estar mejor, a volcarnos un poco más en su portería y el juego de cuatro nos ha dado un poco más de movilidad con la pelota y nos ha permitido tener más el balón». A lo que se une que «hemos subido un poco más la confianza a nivel defensivo y hemos empezado a generar más ocasiones». Y ha destacado que «los últimos quince minutos ha sido muy buenos». El 1-1 de Josete en el minuto 23 «nos ha hecho crecer en confianza y nos ha dado algo más de estabilidad». Su escuadra encadenó ocasiones en la recta final y logró el triunfo «en una jugada a balón parado con un buen disparo desde fuera».
El portero-jugador de Moral B «lo hemos defendido muy bien y ellos han tenido ocasiones, lo que es normal porque es un equipo con mucha calidad de pase».
A partir de ahora «tenemos cinco bolas de Campeonato y es muy importante ser consciente de que cada partido va a ser bastante complicado».
El primero será este sábado: «Un partido muy difícil ante un equipo como es Sierra que viene de una categoría superior y que llega al Primero de Mayo en una buena dinámica ya que está haciendo una gran segunda vuelta».
Está claro, «antes de celebrar hay que ganar un partido muy complicado frente a uno de los rivales más en forma de la competición y de los más trabajados de toda la Liga». Está claro que «el rival va a vender muy cara su derrota».