El CD Villacañas está disfrutando esta semana, de nuevo, del liderato del Grupo 18 de la Tercera Federación. Según cuenta uno de sus jugadores, Mamadou Bah, el objetivo es «mantener lo máximos posible». Obviamente, el objetivo del cuadro rojillo, a falta de cinco jornadas, es ya acabar lo más arriba que se pueda, sin despreciar ese primer puesto que da el ascenso directo a Segunda Federación.
Pero es algo que el lateral derecho no hablar abiertamente porque, desde su punto de vista, solo pueden mirar «al siguiente partido». Y ese es el que disputarán el sábado (17:30 horas) en el Municipal de Tarancón. Mamadou reconoce que es un enfrentamiento «muy complicado», ante un rival que no se les está dando demasiado bien, y que ya ganó en el campo de Las Pirámides Toribio Santos en la primera vuelta.
A la vez, está convencido de que «las estadísticas están para romperlas», así que acudirán con ese convencimiento. Por lo demás, la filosofía aplicada por su entrenador, Fernando Lominchar, es la de «no mirar más allá del siguiente partido», como reconoce el futbolista hispanoguineano. Eso sí, también admite que «ahora mismo, el Villacañas es el equipo que no depende de nadie».
Es uno aviso para sus rivales por esa parte alta de la tabla, a los que también ve con calendarios complicados. Es más, considera que, a estas alturas de la temporada, «todo el mundo va a poner en juego muchas cosas, y son jornadas en las que se suelen dar sorpresas, así que no está todo dicho». Lo que no se atreve es a valorarlos; mantiene el foco en su equipo.
En este sentido, asegura que lo que debe hacer el cuadro toledano en estos cinco encuentros es seguir aplicando los argumentos de todo el curso: «Somos un equipo basado en el trabajo diario y en que vamos todos a una, sin ponernos techo; casi todos estamos lejos de casa, así que hemos creado una familia, porque nos tenemos que ver todo el tiempo».
Parece que ese es el secreto de una campaña histórica para el CD Villacañas, pase lo que pase. Pero no sería lo mismo sin el apoyo de la afición. Mamadou lo lleva viviendo ya varios años y cree que «cualquier equipo de esta categoría querría tener a la afición que tenemos y el ambiente que genera en casa partido». Es un factor, sin duda, muy poderoso para el cuadro rojillo, dice el defensor: «No solo nos animan solo como locales, sino que viajan con nosotros y nos permiten sentirnos como en casa».