'España decide'. Con ese lema Vox ha celebrado un acto de precampaña en el Hotel Beatriz de Toledo. Un acto junto a un centenar de toledanos en el que sus diferentes interlocutores no dudaron de que serán el partido que más crecerá en las próximas elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo. Presumiendo de que han presentado 83 candidaturas en la provincia de Toledo, Inés Cañizares, como candidata a la Alcaldía de Toledo, lideró el discurso de su partido para la ciudad. Un discurso dirigido sobre todo al resto de formaciones políticas, a las que les dijo que en los comicios se llevarán «un baño de realidad», después de que los toledanos «se hayan sentido engañados durante décadas con sus eslóganes vacío».

Bajo esta premisa, Vox se presentó ante los toledanos como «la única opción de cordura y de sentido común». Algo que cogió fuerza con el último de los discursos, el que venía del invitado principal en la cita y secretario general del partido, Ignacio Garriga. Y es que el representante nacional de la formación se refirió a la candidata a la Alcaldía de Toledo como una persona «comprometida y leal» que cumplirá su palabra «si permitís que irrumpa con fuerza en el Ayuntamiento de Toledo, donde os puedo asegurar que no le temblará el pulso», afirmó Garriga alegando que lo puede plantear después de haber compartido con ella escaño en el Congreso de los Diputados.

En cuanto al mensaje que la propia Inés Cañizares dirigió para los toledanos se resume en acabar con «los engaños», refiriéndose a la gestión de los últimos Gobiernos locales. Cañizares cree que éstos «han dado la espalda a Toledo y a sus toledanos» con varios matices. La candidata habló del «parque temático» en el que, a su juicio, se ha convertido el Casco Histórico o en  «hablar de caudales ecológicos mientras no se dignan a limpiar el río Tajo que tanto nos ha protegido de nuestros enemigos a lo largo de la historia».

Más allá de esos puntos en los que incidió durante su discurso, Cañizares se dirigió al Gobierno local sin mencionar ni una sola vez el nombre de su contricante, planteando que después de «casi cuatro años de política de sofá» ahora «se gastan todo el presupuesto en obras». 

Mención especial para el barrio del Polígono por varios asuntos. En primer lugar, tanto Cañizares como sus compañeros de partido hicieron referencia a los atascos «constantes» de una ciudad «desordenada y mal comunicada» que, aunque mencionó que se viven en varios puntos de la ciudad, son especialmente comunes en los accesos al Hospital Universitario de Toledo.

También tuvo protagonismo en su discurso este barrio para encarnar «la sensación de inseguridad con la que viven sus vecinos» por los últimos sucesos que allí han ocurrido. «No queremos inseguridad, okupación ni la ley de la selva», puntualizó Cañizares.

Por último, la candidata de Vox a la Alcaldía habló de «megaproyectos» presentados por el actual equipo de Gobierno afirmando que «no son ni buenos ni malos, sino que son mentira». Junto a ella estuvo Daniel Arias, presidente provincial del partido, David Moreno, candidato a la Junta y el mencionado Ignacio Garriga. Entre el público se vieron caras conocidas como María Ángeles Ramos, concejala del Ayuntamiento toledano, o los diputados nacionales Ricardo Chamorro y Manuel Mariscal, éste último por Toledo.