El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha sacado a concurso, por un valor de 3,22 millones de euros (IVA incluido), las obras para la instalación de balizas disuasorias de fauna y el despeje de vegetación en la carretera N-401, entre los kilómetros 118,500 y 149,100, en los municipios de Los Yébenes y Urda, en la provincia de Toledo.
Estas obras serán financiadas a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, bajo el apartado de «sostenibilidad, eficiencia energética y acción contra el ruido».
Este sistema evita la fragmentación del ecosistema, ya que las balizas permiten el paso de fauna y solo se activan cuando un animal intenta cruzar la carretera mientras hay un vehículo dentro del radio de acción de las balizas. Estas balizas funcionan con placas solares y tienen un alcance de entre 13 y 17 metros, por lo que se ha proyectado colocarlas cada 20 metros.
Con el fin de monitorizar la zona protegida y evaluar el funcionamiento del sistema, se colocarán diez cámaras en postes de 15 metros de altura, equipadas con paneles fotovoltaicos para generar electricidad de manera autónoma.
Además, se instalarán señales luminosas disuasorias que alertarán a los conductores para reducir la velocidad y prevenir accidentes. Estas señales se colocarán entre 150 y 200 metros antes de cada tramo para dar tiempo suficiente a los conductores a disminuir la velocidad y así reducir los riesgos en caso de impacto. Dado el alcance limitado de las señales, también se instalarán aproximadamente cada 1.000 metros. Los dispositivos incluyen dos elementos de disuasión: ultrasonidos y luces LED intermitentes, que emiten señales acústicas y luminosas para alertar a los animales cercanos a la carretera que intenten cruzarla. Las balizas solo se activan cuando hay tráfico.