El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha visitado hoy viernes las obras del muro de Gerardo Lobo, que avanzan a buen ritmo y dentro los plazos previstos.

Esta actuación busca facilitar la movilidad en esta zona de la ciudad cuando las obras de la Delegación del Gobierno impliquen cortes de tráfico en la plaza de Zocodover. Así se garantiza la seguridad y la maniobrabilidad en la salida de vehículos, especialmente de los autobuses.

Las obras de acondicionamiento de la intersección entre Gerardo Lobo y la avenida de Castilla-La Mancha pretenden facilitar el giro a la izquierda de los autobuses urbanos que bajan desde el Casco histórico sin que tengan que interferir en el resto del tráfico que circula junto al río.

La actuación municipal ha demolido una franja de, aproximadamente, 16 metros de muro para posibilitar dicho giro. Se trabaja en el retranqueo de la la escalera actual y en su reconstrucción como cierre del muro que se encuentra en proceso de levantamiento.

La demolición ha conllevado una excavación en caja para los cimientos de la futura explanada, un nuevo muro de cierre y escaleras, además de las adyacentes excavaciones en tierra vegetal de los taludes existentes. Respecto al firme en calzada, se renovará la sección completa del firme existente, incluida la capa de rodadura. Para poder realizar los giros con las pendientes transversales y rasantes adecuadas, se ejecutará una capa de regularización de unos doce centímetros de espesor para el carril interno de la avenida Castilla-La Mancha, y de unos ocho centímetros en el nuevo carril de giro de la calle Gerardo Lobo. También se pone a cota las tapas de registro y los sumideros afectados.

La inversión prevista roza los 94.000 euros.