Hay pocos deportes en los que el que merece ganar, acaba perdiendo. Le pasó al Toledo. Venía de tres victorias seguidas, de acumular ocasiones y goles en cantidades industriales, y se pegó el costalazo. Ajo y agua. Se tiene que fastidiar y aguantar el equipo de Alfredo Santaelena porque el CD Pedroñeras se aprovechó de ese día lúcido en el que el rival defiende bien, aguanta las embestidas, su portero se viste de héroe y las dos ocasiones que se presenta arriba, se meten. Es el mejor resumen para una derrota inmerecida que enfadó a los aficionados. Y con razón. Le estaban acompañando los resultados. Más o menos. 

Mancebo casi caza un primer centro al área. El segundo de Kofi no lo pilló nadie a la primera. Sí Mazzocchi, a la segunda, pero resolvió con una chilena mal ejecutada. Intentaron los verdes mover de un lado para otro, y sin parar de meter centros.

Se notó a un Toledo más acelerado, obsesionado por jugar a pocos toques y por darle la pelota a Mancebo, el que intentó agitar más el jueego ofensivo. El campo, por la lluvia, estaba todavía más rápido que los jugadores. Así fue imposible buscarle las cosquillas al rival.

El equipo toledano perdió en casa en una mañana desapacible - Foto: David PérezPor romper un poco la monotonía, habrá que contar que, en el minuto 21, un centro desde la derecha lo remató Kofi muy alto. Nada de nada. Su giro de cuello no fue bueno. El CD Toledo se estaba volcando todo el rato por el costado derecho. Zourdine apenas entró en juego en el otro lado.

Kofi se atrevió después a disparar desde fuera del área. La pelota pegó en el lateral de la red. No dejaron de intentarlo los de Alfredo Santaelena. En el rebote de un córner, en el minuto 26, Kupen acabó poniendo el balón al área, y Kofi remató de cabeza por encima de la portería de Ahmed. Volvió a tener minutos de más llegadas el Toledo, con una de Rodri en la que casi se mete en la portería con el balón. En ese saque de esquina, Mazzocchi dispuso de un lanzamiento cruzado que se marchó fuera.

La gente aplaudió a su equipo porque no dejaba de probar y probar. Generó constantemente aproximaciones y saques de esquina. En el siguiente, el balón le acabó llegando a Reguera, escorado a la derecha. Puso un centro cerrado que no remató nadie, y que acabó dando en el palo.

El equipo toledano perdió en casa en una mañana desapacible - Foto: David PérezEn el minuto 35, Kofi se tiró al suelo. Se había lesionado. Álvaro salió por el africano para darle más capacidad de asociación. Y eso que el ghanés fue uno de los más activos durante la primer parte. Empezó a rodar más Zourdine, eso sí. En el minuto 40, probablemente, Rodri tuvo la más clara del momento. Vio al senegalés pidiendo el balón en un lado, pero su lanzamiento se fue al alcázar.

Un minuto después, llegó el primer remate entre palos. Lo hizo Mazzocchi de cabeza, tras una acción por el lado izquierdo. Ahmed no sufrió nada para agarrarlo. Quería irse el equipo de Santaelena con un gol antes del descanso. Por eso, Mancebo y Álvaro mezclaron muy bien por su costado. El centro del segundo lo recogió en segunda instancia Zourdine, que chutó flojo ante el guardameta. Sin problemas.

El CD Toledo encerró por completo al CD Pedroñeras en su área, pero nadie se vistió de abrelatas. Otra vez la tuvo Zourdine, a bocajarro. Y Ahmed respondió esta vez  con un blocaje de los que suenan en la grada. El repertorio de ocasiones empezó a ser cada vez más claro.

Salieron los verdes con ímpetu a la segunda parte, pero es verdad que los visitantes miraron a los ojos a Dani Simón por primera vez, con una llegada de Borja Arellano. Al Pedroñeras no le duraba ni cinco segundos el balón en los pies.

Aunque estaba saliendo algo más que en el primer periodo, la dinámica era la misma. En el minuto 53, Mancebo se fue por el lado derecho, y remató prácticamente solo, tras buscarse su hueco. Zourdine empujó el balón en la línea. Estaba claramente en fuera de juego.

Migueli cambió a dos jugadores de golpe en el minuto 56. Se veía con más opciones que antes. Santaelena miró al banquillo, y pensó que dos pesos pesados podìan sacarle del apuro: Chupi y Manu Gavilán. Fue antes de otro disparo con mala leche de Mancebo. Paró Ahmed.

Antes del minuto 70, algunos jugadores locales se empezaron a desesperar. Los empeñados en entenderse, sí que persiguieron el tanto con más ganas. Una combinación entre Manu Gavilán, Chupi y Mancebo casi acaba batiendo al portero visitante. Pero la afición contuvo la respiración cuando Kupen dejó botar la peltoa ante Borja Arellano. El '10' rojiblanco no acertó.

En el área contraria, Mancebo se topó de nuevo con Ahmed en otra llegada. El acoso se intensificó, pero el Pedroñeras no paraba de salir a correr. Tenía espacios. Rossi acabó en el área buscándose un hueco, y logró sacarse un tiro que pegó en un rival, y se acabó colando en las redes. Quedaba menos de un cuardo de hora.

Chupi logró alojar la pelota en la portería poco después, pero se encontraba claramente en fuera de juego. El Pedroñeras se había defendido a la perfección, pues, en estos momentos, más aún. El ánimo no era el idóneo, y ya el fútbol, tampoco le daba. No se estaban generando las ocasiones de antes. Aun así, Mauri tiró de sus recursos. El balón se estampó en el hombro de un rival.

Para colmo, en un largo descuento de ocho minutos, los rojiblancos anotaron el 0-2. Mauro resolvió un contragolpe perfecto, con el Toledo volcado.