El acto celebrado ayer en Toledo y convocado por el Partido Popular contra la posible Ley de Amnistía pactada por el presidente del Gobierno en funciones y candidato a la investidura, Pedro Sánchez, con el partido soberanista catalán Junts, congregó a cerca de 2.000 fieles, según fuentes del PP, aunque la delegación del Gobierno cifró en 1.000 asistentes.

El líder de los 'populares', Alberto Núñez Feijóo, aprovechó el foco para señalar a Sánchez, enarbolando un discurso directo contra el líder socialista y el PSOE. En palabras de Feijóo, Sánchez será juzgado por «la historia» al entregar a los independentistas «todo» a cambio de «nada».

Recordó las palabras del president de la Generalitat, Pere Aragonès, en el Senado con las que defendía la amnistía como «punto de partida» del independentismo, porque el final del camino será la autodeterminación. Feijóo expresó en ese momento que el punto de partida del soberanismo sería el «punto final» de Sánchez.

Para Feijóo, los socialistas perdieron hace tiempo el «amor propio», ya que su líder dio «la espalda a la decencia» y le ofreció «la mano a Bildu». El 'popular' se lanzó a la yugular de los socios del Gobierno de coalición al considerar que titubean al no condenar el terrorismo de Hamás.

Otro de los ataques directos a la legislatura del Ejecutivo nacional fue al citar la Ley del 'Sólo sí es sí' y las reducciones de condenas de violadores. Remarcó que para que no vuelviese a ocurrir una «chapuza» de ese calibre los ciudadanos le eligieron el 23-J.

españa sometida al interés de unos pocos. Los españoles no quieren «someterse» a los intereses de unos pocos, dijo el líder nacional del PP entre aplausos y vítores de «presidente». Por ello, pidió que se repitieran las elecciones para que se pueda votar «libremente el 14 de enero», acabando así con la «financiación ideológica», para velar por «la igualdad» y no permitir «la Amnistía».

Feijóo volvió a señalar a Sánchez, esta vez reconociendo que será presidente del Gobierno, «asumirá la presidencia como un presidente dimitido» e incumplirá «su principal deber en el cargo: velar por la igualdad de los españoles».

Consideró la posible mayoría en el Congreso de los Diputados de «espejismo» y acusó a la presidenta de la Cámara Baja, Francina Armengol, de «cerrar» el Congreso a voluntad de su jefe. El líder del PP se abanderó de una de las consignas de Vox al remarcar el «descontrol» de la llegada de migrantes a la frontera española y remarcó que España es el «bochorno de Europa».

Feijóo concluyó su intervención, concluyendo así el acto, alabando la labor de los 'populares' que cumplirán con su deber en el Senado y con las instituciones, poniendo a Sánchez en la diana y echándole la culpa de los problemas de España, al mirar sólo por su «ego».

«No vamos a defraudar la confianza de quienes nos votaron el 23 de junio», expuso. Feijóo sentenció que los ciudadanos tienen en frente a «un político que cumplirá con su responsabilidad», a pesar de que eso le cueste la presidencia del Gobierno. «Aquí tenéis un partido de Estado, tenéis la España de ciudadanos libres e iguales». Acto seguido sonó el himno de España mientras ondeaban más banderas rojigualdas que azules.