La remodelación del entorno del parque de La Vega prevé la eliminación de las plazas de aparcamiento situadas en el primer tramo de la calle Cardenal Talavera, un espacio comprendido entre el Hospital de Tavera y la Puerta de Bisagra. La capacidad de estacionamiento perdida se derivará a la adyacente calle Duque de Lerma, una vía que el Ayuntamiento de Toledo también pretende reformar.
La retirada de las plazas de aparcamiento regulado en este punto de la ciudad se vincula con las mejoras de movilidad que el equipo de Gobierno municipal pretende ejecutar dentro del proyecto integral de rehabilitación de La Vega, una propuesta financiada con dinero europeo procedente de los fondos Next Generation. La renovación del parque con caudales comunitarios fue aprobada por el anterior Ejecutivo de Milagros Tolón, aunque el bipartito aspira a mejorar el plan e incluir medidas que hagan de uno de los cruces de caminos más transitados de Toledo un lugar más «humano, accesible, disfrutable», explica el alcalde, Carlos Velázquez.
El objetivo del Ayuntamiento es trasladar la «subvención más allá del parque» y, a través de diferentes modificaciones, «dignificar la entrada más importante a la ciudad», añade el primer edil. El Gobierno municipal se compromete a revitalizar un área «muy alejada de lo que debería ser una zona peatonal».
La propuesta municipal para el entorno incluye actuaciones urbanísticas y medioambientales. El actual pavimento asfáltico que alfombra la calle Cardenal Tavera será sustituido, en el tramo más próximo a la Puerta de Bisagra, por «un adoquinado» que facilitará la transición hacia la parte más antigua de la capital regional. De esta manera, habrá una nueva y «anterior» entrada al Casco Histórico, un paso que ofrecerá continuidad estética, paisajística y visual a quienes avancen, a través de Bisagra, en dirección al Casco histórico.
La reforma promueve la transformación integral de la zona en un área más agradable para el peatón. El alcalde señala que la acera que transita desde Tavera hasta Bisagra tiene apenas un metro de anchura, una circunstancia que dificulta el tránsito a pie y que incluso lo hace peligroso.«Por ese acerado no puede ir una silla de ruedas, ni siquiera un carrito de niños pequeños», detalla el alcalde, Además de ampliar el espacio de paso, se impulsará la accesibilidad, también para las personas con movilidad reducida, al recurso medioambiental. Otra de las premisas del Ayuntamiento es facilitar una mayor afluencia popular a uno de los parques urbanos más importantes de la ciudad.
El pasado miércoles, el portavoz del equipo de Gobierno, Juan José Alcalde, no ofreció una fecha concreta para el inicio de las actuaciones en este punto de Toledo, aunque sí confirmó que a lo largo de la próxima semana se enviará el proyecto al Ministerio de Turismo, organismo que debe validar la reformulación realizada por el bipartito.
Las ideas que ha incorporado el actual Ejecutivo incluyen la reordenación de las vías próximas al parque y Bisagra, además de la eliminación de decenas de plazas de aparcamientos. «Queremos poner en valor Sisebuto, la Vega y Recaredo», aseguró Alcalde en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno. En ese contexto, «la Vega no puede ser un parque de paso, sino de referencia», proclamó.