Roberto Encinas se mostró contento por sus jugadores en la primera rueda de prensa pospartido como técnico del CD Illescas, después de ganar por 2 a 0 al Atlético Paso. Desde su punto de vista, «el trabajo de la semana tuvo su recompensa, con un esfuerzo muy grande, aunque a veces no pasa».
Cree, incluso, que debieron ir «más holgados en el marcador» por el juego desplegado, pero reconoció su felicidad porque se plasmara lo que habían trabajado durante la semana: «De hecho, cuando no lo hicimos es cuando sufrimos más».
Una de las claves fue «salir fuertes en los primeros quince minutos de cada parte», porque, según explicó, «a los equipos canarios les cuesta cuando salen a la península», y se les presentaron «bastantes situaciones de robo para poder transitar».
Como añadió, el nuevo entrenador, «es necesario que el equipo se limpie la cabeza» de cara a lo que queda. Con el 1-1 les sobrevino un «bajón anímico» que Encinas considera «normal». Por eso, se está trabajando también ese aspecto, porque «en cualquier momento surgen dudas».
Ahora mismo, tras este triunfo, en lo único que está pensando es en el Melilla y en «darles unas herramientos para poder hacer daño a los contrarios». Es fundamental, agregó, «contar con la afición». Encinas reside en Carranque, y conoce perfectamente este campo: «Debemos tener unas señas de identidad, como la presión arriba, la actitud y el compromos; a esta afición le gusta todo eso, y es por donde queremos tirar, porque ellos nos apoyan siempre, hasta en un día inhóspito como el de hoy».
Por lo demás, el técnico blanco admitió una carencia de gol, pero también que firma ahora mismo «marcar dos goles todos los días, y que el rival nos tenga que hacer dos al menos para empatarnos». En el caso del partido ante el colista, asegura que podían haber hecho más, pero que erraron en la finalización.
Asimismo, Roberto Encinas se ha planteado las siete jornadas que restan como pequeñas etapas en las que «ir consiguiendo poco a poco, y que ellos se lo crean». Además, ya dejó claro que quien quiera jugar, se lo va a tener que ganar. Por eso, confesó haber tenido que hablar con algunos futbolistas que habían cuajado una buena semana de entrenamientos, y se tuvieron que quedar en el banquillo, para pedirles disculpas. «Son importantes todos, y esto lo tenemos que sacar como equipo», manifestó.
Lo bueno, según Encinas, es que «todos empiezan de cero cuando llega un nuevo entrenador», pero, como apuntó, «si tengo que hacer un doble cambio en el descanso, lo voy a hacer, así que nadie se puede relajar».