La presidenta de la Diputación, Concepción Cedillo, ha recibido al alcalde de Mascaraque, Enrique Óvilo, y al concejal de Cultura y Turismo, Diego Bravo, una delegación incorporada en esta legislatura. El propósito: difundir a sus personajes ilustres y a los monumentos y lugares de interés del pueblo.

El equipo de Gobierno pretende dar a conocer los edificios más emblemáticos de Mascaraque, como el castillo, declarado Bien de Interés Cultural desde los años 60, de propiedad privada y no es visitable. El Ayuntamiento quiere revitalizar ese espacio y pueda revertir en los ciudadanos y formar parte de la vida pública.

El Ayuntamiento organiza actividades culturales en torno al castillo y prevé celebrar este año unas jornadas de recreación histórica, centradas en los comuneros y en la figura de Juan de Padilla, un hidalgo castellano, conocido por su decisiva participación en la Guerra de las Comunidades de Castilla, cuya familia habitó el castillo entre los siglos XIV y XV.

Enrique Óvilo reivindicaba ante Concepción Cedillo la obra y el legado de su vecino más ilustre,  el pintor renacentista Juan Correa de Vivar, uno de los pintores más destacados del Renacimiento español, muy influido por el estilo de Rafael. El Museo del Prado custodia más de 40 de sus cuadros; su producción figura también en el Museo de Santa Cruz y en iglesias y conventos de toda España.

Óvilo pretende rehabilitar una casa en desuso para hacer un museo dedicado a Juan Correa de Vivar y museo etnográfico. En cuanto a los Planes provinciales, Mascaraque dedicará en esta anualidad a la rehabilitación de un salón de actos.