La UD Las Palmas venció al Real Valladolid (2-1) y continúa con su escalada en la clasificación de LaLiga EA Sports gracias a un doblete de Sandro Ramírez que acentuó, además, la condición de colista de su adversario.
La primera parte resultó pareja, con mayor sensación de dominio local y, sobre todo, una gran efectividad del conjunto amarillo, que tomó la delantera en el marcador en el minuto 20.
Las Palmas sigue la escalada al ritmo de Sandro Ramírez - Foto: Quique Curbelo (EFE)
La falta de contundencia de la defensa pucelana propició ese primer tanto del partido, originado tras una jugada individual de Alberto Moleiro en la que desbordó a Luis Pérez y Juric, y que remachó Sandro Ramírez ante su exequipo sin que Hein ni sus centrales lograsen interceptar o alejar el balón del área.
Las Palmas sigue la escalada al ritmo de Sandro Ramírez - Foto: Quique Curbelo (EFE)El Valladolid, que había comenzado el choque con dos delanteros, cambió pronto a un 1-4-1-4-1, con Sylla en la izquierda y Marcos André como único punta.
El equipo blanquivioleta tuvo su primera gran opción de marcar en el minuto 36 con un remate alto de Kike Pérez, tras jugada de Lucas Rosa por la línea de fondo y pase atrás, en una recuperación del propio lateral zurdo.
Las Palmas, que hasta entonces parecía vivir de manera cómoda, sin sobresaltos, tenía como su principal amenaza en ataque a Fábio Silva, al que pierde para la visita a la Real Sociedad al ver la quinta cartulina amarilla del curso por simular una caída dentro del área delante del árbitro.
El empate visitante llegó tras un centro de Luis Pérez desde la derecha que Sylla prolongó de cabeza, ganando en el salto a Viti por su mayor envergadura, y Marcos André, solo entre los centrales, remachó a la red.
Tras el descanso, y como había ocurrido en el primer tiempo, el encuentro continuó equilibrado y se rompió en una acción individual, de nuevo protagonizada por Sandro Ramírez, con un gran remate a la escuadra con la pierna izquierda, desde la frontal del área, imparable para Hein.
Álvaro Rubio, entrenador provisional del Valladolid, buscó la reacción con los cambios, pero a riesgo de descubrirse demasiado, la entrada de futbolistas de ataque como Latasa, Machís o Amath no dieron el resultado esperado porque su equipo, de forma paradójica, ya no volvió a inquietar a Cillessen.
La Unión Deportiva, que también perdió a Álex Suárez para la próxima jornada por acumulación de tarjetas, se defendió bien, sobre todo en las acciones a balón parado, e incluso pudo sentenciar el partido en un mano a mano de Jaime Mata -otro exjugador del Valladolid- que rechazó Hein.
Pese a los ocho minutos de propina, el equipo amarillo consiguió mantener su mínima diferencia para confirmar la victoria y su escalada en la clasificación desde la llegada al banquillo de Diego Martínez.