La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Arcicóllar ha deparado un hallazgo relevante. Tras su retablo mayor, los expertos han confirmado la existencia de un importante conjunto pictórico mural bajomedieval ubicado en el ábside románico mudéjar.
En julio, el párroco, Ignacio López, el arqueólogo Rubén Pérez consultaron a los profesores Santiago Manzarbeitia y Fernando Pérez Suescun, del Departamento de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid, la valía del hallazgo. Los expertos han concluido que los restos forman parte de un conjunto pictórico mural con entidad propia y mucho más amplio.
Las pinturas están parcialmente ocultas por un enlucido de cal que ha perdido la cobertura con el tiempo; una intervención necesaria eliminará este enlucido, acomapañada de una limpieza superficial y una consolidación que permitará una adecuada restauración y conservación.
El estilo pictórico se caracteriza por un grafismo negro que delinea las figuras, resaltadas ocasionalmente con campos de color rojo, ocre y blanco para ciertos detalles. El estilo, marcadamente lineal, el programa iconográfico y la grafía de la inscripción hacen pensar en una fecha de realización que ronda el año 1500.
Este tipo de retablos murales fueron un recurso habitual para los templos rurales durante la baja Edad Media por su rapidez de ejecución y economía de la técnica pictórica mural; posteriormente eran encalados y ocultados por retablos de madera con tablas pintadas en años posteriores.