Reivindicación de vida a la sombra de un almez

J. Monroy
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La Asociación de Vecinos El Tajo exige más árboles en el Polígono y en la ciudad para hacerlos más amables, al menos, uno por cada tres toledano

Reivindicación de vida a la sombra de un almez - Foto: Yolanda Lancha

La reivindicación está clara, se necesitan más árboles, árboles además, autóctonos, en los barrios. Un grupo de vecinos del Polígono, convocados por su Asociación El Tajo, se ha juntado este jueves por la mañana a la sombra del almez de Bullaque con Boladiez para alzar la voz por los árboles.

«Este almez, que es nuestro fetiche, constituye un año más la visibilización de la necesidad de arbolado en nuestro barrio en particular y en nuestra ciudad en general», ha explicado la coordinadora vecinal, Gemma Ruiz, para quien los árboles «son necesarios porque nos dan vida, nos dan oxígeno, un solo árbol contribuye como diez aires acondicionados, y estamos inmersos en un cambio climático que algunos partidos se empecinan en negar, pero que es una realidad, y nos lleva a tener olas de calor de 42 grados, e incluso más, en estos veranos tan tórridos que vivimos en nuestra ciudad de Toledo». Así que «nos merecemos todo los vecinos sombras con estos árboles por las que poder pasear, tener una ciudad mucho más amable y sostenible, como decía el lema de nuestra carrera pedestre de las fiestas».

Hasta que las administraciones, y en particular el Ayuntamiento, no hagan «un plan de arbolado serio», la Asociación se congregará cada año debajo del almez. Esta ha sido la tercera cita. La intención es que, como pide la OMS, por cada tres habitantes haya un árbol «y a día de hoy estamos muy lejos de conseguirlo». Porque el Plan de Arbolado presentado por el Ayuntamiento «es insuficiente, la inversión es mínima, no más de 120.000 euros para toda la ciudad, esto es irrisorio con la extensión que tenemos».

La reivindicación, por lo tanto, es de sombras de árboles, de especias autóctonas. El Tajo pide cuidado de no plantar especies de fuera, y que hay mantenimiento de los árboles. También rechazó el glifosato por cancerígeno.

Fuentes. Y junto a la sombra, agua. Ruiz ha insistido en la necesidad de dotar al barrio de más fuentes, como ha pedido la Asociación en los Consejos de Participación. Su idea es que se utilicen los presupuestos participativos para traer al barrio fuentes como las de otras ciudades, que las hacen mucho más amables. «Pero se nos ha dicho que no está contemplado un aumento de las mismas, y que únicamente se va a mejorar alguna de ellas», apuntó.

Finalmente, Ruiz recordó a los responsables municipales que con la redacción del nuevo POM tienen la oportunidad de hacer una ciudad mucho más verde, menos asfaltada y con cuidados de las zonas verdes y parques ya existentes, «que están muy muy abandonados». Sin ir más lejos, la Fuente del Moro «está totalmente abandonada a su suerte, no está ni recogida en el pliego de cuidado y  mantenimiento de parques y jardines».