El expresidente de Castilla-La Mancha, José Bono, hizo mención -en un acto público de cierre de jornada en la ciudad de Albacete- a las furgonetas que el PP de Castilla-La Mancha está paseando por la región con la fotografía de Emiliano García-Page junto a la del dirigente 'abertzale' Arnaldo Otegui, "que no hace falta evaluar su conducta porque fue maestro e impulsor de asesinatos", dijo Bono.

Calificó estos vehículos como "las furgonetas de la vergüenza, de la ignominia" y, en este punto, bajó la voz para confesar -aunque le pidieron que no lo hiciera- que, siendo presidente, le llamaron del Ministerio del Interior para decirle que "la policía había descubierto por orden judicial un piso franco de ETA y que allí había una documentación sobre dos consejeros de mi gobierno, que me preocupase y que tomase medidas. Uno de ellos era Emiliano García-Page". 

La intervención de Bono fue la más aplaudida por las más de 700 personas que acudieron al mitin electoral del PSOE y el expresidente y exministro de Defensa no defraudó. Confesó otro secreto y corrigió a Page, que ha dicho en alguna ocasión que ningún cargo socialista había ido a una cárcel ni siquiera de visita. "Emiliano se equivoca porque sí hemos ido", dijo Bono. Recordó que el actual presidente regional y él fueron varios años a la cárcel de Herrera de La Mancha a visitar a los guardias civiles para "que nos escupieran". "Sí fuimos a la cárcel, a estar con la Guardia Civil para poder decir a aquellos asesinos con quién estábamos cuando entonces, recuerdo, que nos lanzaban cohetes al entrar". Era el día 24 de diciembre, el día de Nochebuena durante "muchos años". Por eso, añadió, le llena de "indignación esa furgoneta de la ignominia".

Por todo ello, el expresidente de Castilla-La Mancha pidió al candidato del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, que retire las furgonetas en las que están las imágenes de Emiliano García-Page y Otegi.

MUCHAS VECES MIRÉ DEBAJO DEL COCHE.

Posteriormente, el actual presidente autonómico y candidato del PSOE a la reelección, Emiliano García-Page, también quiso hablar de la banda terrorista. Confesó que le resultaría "triste" que el futuro de Castilla-La Mancha lo decidiera Otegui, en referencia a las furgonetas del PP. Recordó, en este punto, que mucha gente en España fue objetivo de ETA y "nunca he querido contar cuantas veces he tenido que agachar para ver debajo del coche cuando iba a llevar a mis hijos al cole" o emplear inhibidores de frecuencia por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. 

Incidió en que todas las víctimas de la banda armada se merecen el recuerdo de todos los españoles porque dieron su vida por la democracia. "No ha habido rendición, ha habido victoria y bastante llevo mal que siendo Zapatero presidente y Patxi lehendakari no presumieran, no celebrara con solemnidad un éxito de toda la sociedad española". Es más, reconoció que "otros" no hubiera tenido esa "timidez".