Se cumple un año del nuevo Gobierno municipal y a pesar de la sentencia firme del TSJ de septiembre de 2020 que obliga al Ayuntamiento a prestar a Montesión los mismos servicios que al resto de barrios de la ciudad y que el Consistorio así lo asumiera en abril de 2021, los vecinos no ven nada nuevo bajo el sol; bueno sí, ven que sus calles se siguen deteriorando poco a poco sin que este Ayuntamiento, ni el anterior, hayan hecho nada.

A la degradación habitual, se suman además las generadas por los robos. Ya a primeros de este mes, fueron sustraídos más de mil metros de cable de alumbrado de las calles, con lo que varias calles de la zona quedaron a oscuras por la noche. Un robo que se repitió en la madrugada de este lunes al martes. Un vecino avisó al Cuerpo Nacional de Policía de que se estaba produciendo una nueva sustracción. Personados los agentes, los individuos dejaron las herramientas con las que estaban haciendo herramientas para acceder al cable y huyeron. Finalmente, la Policía pudo detener a tres hombres y una mujer (que según los vecinos, portaba un niño de tres meses).

Esta vez los ladrones desmantelaron más de cuatrocientos metros de cable, con lo que en estos momentos, la segunda fase de la urbanización y una calle de la primera están «como la boca del lobo» por la noche, sin ninguna luz.

Roban kilómetro y medio de cable del alumbrado de MontesiónLarga espera. Vecinos de Montesión, puestos en contacto con este diario, se preguntan quién es ahora, tras la sentencia firme, el responsable de reponer el alumbrado público. Pero más allá, se preguntan cuándo se va a hacer cargo el Consistorio de su barrio, como de cualquier otro. Hay que recordar que en enero el equipo de Gobierno se mostró dispuesto a hacerlo, siempre que estuvieran todos los vecinos de acuerdo y las calles en buen estado.

El quid de la cuestión puede estar en este segundo punto, dado que a falta de mantenimiento de calles y viales, estos se han venido deteriorando durante los últimos años. Los vecinos denuncian «grandes y peligrosos socavones, cada vez más grandes y peligrosos». Continúan con los registros de alcantarillas levantadas y sueltas y «una de ellas, provocó hace unos días el siniestro de un vehículo por la rotura del carter, accidente  afortunadamente sin heridos.

Reivindican estos vecinos que el Ayuntamiento se haga cargo del suministro de agua potable, dado que en estos momentos los vecinos tienen que pagar una persona para que controle diariamente el cloro de su depósito. Y que ponga más con contenedores de basura, que los tres actuales para 157 familias, ninguno de reciclaje, y en un único punto a la entrada de la urbanización. Finalmente, tienen miedo por la broza de las parcelas que rodean la urbanización, porque tras el gran incendio y dos recientes conatos, temen que cualquier día haya un conato peor. Así se lo han comunicado al Ayuntamiento por escrito.

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