El número 48.020 no pasó de largo y alegró la mañana a 'Doña Lola', la administración de lotería de la calle Toledo Ohio, que llevaba poco más de dos horas esperando que tocara algún premio. No fueron los 30 millones de euros que cayeron en Chamartín (Madrid) con este cuarto premio, pero sí diez décimos vendidos en ventanilla en este Sorteo Extraordinario de Navidad que dejó 200.000 euros, la cuantía más alta en Toledo capital esta vez, ya que la diosa Fortuna pasó por otras localidades de la provincia con más décimos vendidos y más cuantía en premios.
La alegría y el cava no tardaron en correr con rapidez por la administración al enterarse de este cuarto premio. «Estamos muy contentos», aseguró Cristina Carrascosa, responsable de este despacho de lotería, con esperanza de dar algún premio más en un sorteo que se resistió a dar pronto el segundo premio a pesar de que el Gordo ya había salido del bombo.
En Doña Lola estuvieron pendientes del teléfono por si alguien llamaba para darles las gracias. En esta ocasión, no saben cuántos agraciados hay de esos diez décimos vendidos y cabe la posibilidad de que sea un único acertante que decidiera comprar una sábana, es decir, los diez décimos. Carrascosa dio a entender que el premio podía haberse quedado en Toledo capital, pero también haber viajado en el monedero de algún turista.
Los empleados de 'Doña Lola', igual que ocurre en 'La Caprichosa', están acostumbrados a salir a la calle a brindar porque la suerte también acompaña a esta administración desde hace años. Ambas, situadas en el Casco, a cien metros la una de la otra, forman 'la milla de oro' de Toledo.
En relación a los premios, Carrascosa recordó ayer que en la Navidad de 1998 la suerte cayó de lleno en 'Doña Lola' con un segundo premio. En aquellos años la administración la regentaba su abuela y recuerda que tocaron «muchos millones» en Toledo y el premio se repartió entre la plantilla del Museo de Santa Cruz.
La suerte no reincidió a lo largo de la mañana, pero los 200.000 euros repartidos fueron suficiente aliciente y la administración no paro de recibir clientes y curiosos que se pararon a preguntar y compartir un rato de charla y de alegría con una plantilla que le pondrá la misma ilusión y ganas al sorteo del Niño del 6 de diciembre.
Más dinero. 'Doña Lola' tuvo la suerte el año pasado de vender un décimo de uno de los quintos premios de la Lotería de Navidad, pero le supo a poco y ayer logró quitarse la espinita al repartir 200.000 euros gracias a diez décimos. Esta administración está acostumbrada a dejar un buen reguero de euros, aunque falle algún año.
En 2021, la suerte dejó en 'Doña Lola' décimos de un cuarto y de un quinto premio, una historia idéntica a la ocurrida en 'La Caprichosa'. Ambas repartieron 520.000 euros. Cuestión de trabajo y de mucha suerte.