La sección primera de la Audiencia Provincial juzgará el miércoles, desde las 9:30 horas, a cuatro individuos por conspiración para el asesinato de un quinto, identificado por las iniciales J. M. G. G. La Fiscalía pide 10 años por la supuesta comisión de ese delito para tres de ellos, más otros tres años de cárcel por el delito de extorsión a dos de los procesados.
Según el escrito de acusación del ministerio público, uno de los acusados, S. G. M., quería acabar con la vida de J. M. G. G. y 'contrató' a dos individuos, identificados como C. N. B. y A. T., para ejecutar el asesinato, a cambio de 45.000 euros. Así, el primero abonó 5.000 euros como adelanto de la comisión del crimen.
Los tres se encontraron en diferentes ocasiones para concertar y planear cómo los dos sicarios acabarían con la vida de la víctima. De esta manera, según la acusación, sopesaron el modus operandi, e incluso, la posibilidad de incendiar la vivienda del perjudicado para que pareciera un robo.
El 5 de diciembre de 2019, una mujer, pareja sentimental de uno de los presuntos sicarios y también acusada en el juicio, se puso en contacto con la diana y le aseguró que disponía de una información muy relevante relacionada con su integridad física. Para la revelación, debía abonar a la procesada una cantidad de dinero. Actuó presuntamente de acuerdo con su novio, C. N. B.
Los dos supuestos sicarios acordaron con la víctima un encuentro en el que, a cambio de 3.000 euros, le mostrarían una grabación con información sobre su vida e integridad física. Así, le manifestaron que su suegro había contratado a unas personas para darle una paliza y que, al escuchar la grabación, se daría cuenta de los planes.
Pero la víctima, J. M. G. G. avisó a la Guardia Civil y tendió una trampa a esos dos individuos. El 16 de diciembre de 2019, C. N. B. acudió a un restaurante de Quintanar de la Orden y recibió 1.500 euros a cambio de la información contenida en el audio. En ese momento, la Guardia Civil, presente en el negocio de hostelería, detuvo al ahora procesado.
La Fiscalía considera que los tres hombres cometieron un delito de conspiración para el asesinato y pide 10 años de cárcel para ellos. Además, reclama tres años de prisión para A. C. I. y C. N. B. por un delito de extorsión.