En alerta la región por las masas de aire subsahariano

EFE
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La intrusión de masas de aire sahariano con elevados niveles de material particulado (PM10) ha activado la alerta por mala calidad del aire en Castilla-La Mancha

Imagen de archivo de un medidor de calidad de aire - Foto: Arturo Pérez

La intrusión de masas de aire sahariano con elevados niveles de material particulado (PM10) ha activado la alerta por mala calidad del aire en Castilla-La Mancha.

La Red de control y vigilancia de la calidad del aire de Castilla-La Mancha ha alertado de que en las estaciones de medición automática de Ciudad Real, Puertollano, Guadalajara, Cuenca y Los Yébenes (Toledo) se ha superado el umbral de información a la población por material particulado (PM10), según los avisos, consultados por EFE.

Ante esta circunstancia, se recomienda a las personas con problemas respiratorios, mayores y niños que no pasen largos periodos de tiempo al aire libre y, en general, que se limite la realización de esfuerzos físicos prolongados en el exterior.

Las partículas PM10 se pueden definir como aquellas partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, metálicas, cemento o polen, dispersas en la atmósfera.

El valor de información a la población, según la legislación, está establecido en 50 microgramos por metro cúbico (µg/m3).

Los niveles a las 9.00 horas eran de 125 µg/m3 en la estación automática de medición de Guadalajara, de 124 µg/m3 en Puertollano, de 106 µg/m3 en Ciudad Real, de 99 µg/m3 en Los Yébenes y de 80 µg/m3 en la estación de Cuenca.

En todos estos casos, las partículas en el aire superaban el grosor de un cabello humano, que es de 60-70 micras.

La Red de control y vigilancia de la calidad del aire de Castilla-La Mancha centraliza en el centro de control y proceso de datos de calidad del aire de Castilla-La Mancha la información suministrada por las 13 estaciones fijas y dos móviles de medida públicas, distribuidas a lo largo de todo el territorio castellanomanchego.

Las estaciones disponen de equipos para la medición en continuo, tanto de los contaminantes atmosféricos como de las condiciones meteorológicas.