Los problemas por la recogida de residuos en la calle Lobo de la urbanización El Beato continúan dando que hablar. La división de la calle en dos aceras con diferente término municipal ha generado un conflicto que tiene un claro origen, la ruptura del convenio de colaboración que Olías del Rey tenía con el Ayuntamiento de Toledo a través del anterior equipo de gobierno. Y es que según revela la alcaldesa del municipio oliero, Charo Navas, éste se rompió «de manera unilateral» por parte del bipartito que gobierna Toledo.

Esa ruptura ha generado consecuencias. Al margen de lo sucedido en julio con el mercadillo, la más visible es la acumulación de residuos en la calle Lobo. Al respecto, Charo Navas señala que «es mentira que sea un vial sin recepcionar a pesar de lo que desliza ahora el Ayuntamiento de Toledo, sino que es a ellos a quien le corresponde realizar la limpieza de la zona».

Y es en este punto donde hay que poner un matiz importante. A día de hoy, la recogida de la basura de los contenedores en una y otra acera de la calle la sigue pagando Olías y la continúa desarrollando el Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales, dependiente de la Diputación Provincial, por medio de la empresa Gesmat, pese a que en la zona toledana le correspondería a la UTEValoriza-Acciona que lleva la recogida en la ciudad. Es  decir, los vecinos de El Beato siguen tirando la basura en contendores de Olías, que el Ayuntamiento de esta localidad no ha retirado. «Comprendemos que esos vecinos de Toledo tienen la necesidad de ser atendidos, por lo que se han mantenido los contenedores del Ayuntamiento de Olías del Rey por deferencia a los vecinos para que puedan tirar la basura y tener recogida selectiva de reciclaje», explica Navas.

La diferencia, por tanto, según la alcaldesa oliera reside en que tras la ruptura del convenio los trabajadores municipales de Olías del Rey «han dejado de limpiar y desbrozar una vía pública que es término municipal de Toledo» pese a que lo venían realizando durante años como fruto del acuerdo entre administraciones. De este modo, en las fotografías de los residuos acumulados en la zona, Charo Navas aclara que se puede observar que los contenedores están vacíos, porque la empresa Gesmat sigue operando en estos depósitos colocados allí por Olías del Rey, sólo que los restos orgánicos que queden en la vía pública deben ser limpiados por el Ayuntamiento de Toledo.

Esta versión de Charo Navas choca directamente con la que ha ofrecido el equipo de gobierno de Carlos Velázquez, cuando se refirieron a estos episodios como «un problema puntual» causado por una incidencia en el servicio. Navas, además, señala que los vecinos del término municipal toledano «pagan la tasa de basuras en Toledo, por lo tanto es a este ayuntamiento al que le corresponde dar respuesta y atenderlos».

La alcaldesa de Olías del Rey recalca su predisposición para solucionar estos problemas de vecindad. Por ello, Navas informa que «hace casi dos meses» que mandaron una carta al Ayuntamiento de Toledo solicitando una reunión con el alcalde y aún no han obtenido respuesta. 

La regidora de Olías del Rey cree que la reunión es necesaria para solucionar no sólo la problemática con la limpieza de la calle Lobo, sino para abordar otras materias como por ejemplo el suministro del agua a estos vecinos, «que corre a cargo de una infraestructura dependiente del Ayuntamiento de Olías del Rey». Al respecto, Charo Navas destaca que ellos están «encantados» de facilitar el acceso al agua a estos vecinos, «pero a lo que no estamos dispuestos es a que se los perjudique».