A medida que llega el final de la intervención del Ayuntamiento de Toledo en el paseo del Circo Romano, se van conociendo más datos de la actuación arqueológica. En la última Junta de Distrito Norte, el concejal de Urbanismo, Javier Nicolás, confirmó la existencia sucesiva en el tiempo de dos circos en el mismo lugar, el segundo de ellos de siete metros más de longitud, de una mayor categoría, con el que posiblemente Toledo quería competir en la calidad de sus espectáculos con Mérida. Además, el edil informó de que durante la excavación arqueológica se ha encontrado una densidad media de tres personas enterradas por metro cuadrado. A partir de su abandono, y durante toda la Edad Media, la zona fue utilizada como cementerio, hasta el punto que allí se enterraron cuarenta mil toledanos a lo largo de los siglos. La actuación allí realizada ha fotografiado y datado con GPS todos los vestigios, y ha conseguido recuperar algunos restos óseos.

La situación de olvido y abandono de esta zona era tal, explicó Nicolás, que durante la intervención se ha encontrado se han encontrado pozos procedentes de algunos talleres mecánicos llenos de bujías y otros materiales.

La actuación arqueológica ha sacado a la luz los restos situados en el paseo, y ha reforzado las arcadas existentes en el Parque Escolar. Estos últimos evidenciaban graves síntomas de deterioro, y corrían peligro de venirse abajo, por lo que han sido reforzados con puntales de acero para evitar el derrumbe. Lo que se ha quedado fuera de la actuación ha sido el famoso arco situado detrás de la Venta de Aires. Se trata, explicó Nicolás para la decepción de los representantes vecinales presentes en la Junta de Distrito, de un terreno de titularidad estatal, por lo que tendrá que ser el Estado el que trabaje sobre el mismo. El presidente de ‘La Voz del Barrio’ de Palomarejos, Guillermo Escolante, volvió a solicitar que el equipo de Gobierno se arme de valor y expropie la Venta de Aires para recuperar el Circo en su totalidad.

Para Juan Meneses, portavoz de la Asociación de San Pedro ‘el Verde’, no basta con una intervención arqueológica, sino que hay que poner en valor el Circo de forma que todo el mundo entienda lo que allí hubo. Su propuesta es que se haga una recreación de los graderíos, ya sea de la zona de granito, ya sea de la de madera.

La idea del Ayuntamiento es que, una vez concluida esta actuación, el Circo Romano no deje de investigarse. Por esa razón, está muy cerca de alcanzar un acuerdo con la cercana Universidad de Castilla-La Mancha para que haya investigaciones arqueológicas cada año, que queden correctamente tapadas y conservadas hasta la siguiente cata.

Urbanismo. Además, la actuación municipal también está teniendo su faceta urbanística. El aparcamiento de coches estará limitado a una explanada situada al término del paseo del Circo Romano, que está quedando con una terminación cerámica, que trata de no desentonar con el entorno. Frente a la Venta de Aires se ha creado una pequeña calle peatonal, de acceso a las viviendas de los vecinos. Y al cortase la entrada a la avenida de los Canónigos, se ha liberado a este pequeño vial del mucho tráfico que tenía, y ha quedado casi exclusivamente para el uso de sus residentes.

Además, el paseo cuenta con un nuevo acerado que será muy fácil de levantar en caso necesario para hacer nuevas prospecciones arqueológicas. Finalmente, se ha trasladado de allí el alcantarillado que existía, y que en caso de fuga podría haber afectado a los restos del circo romano.