La oposición se levantó esta mañana con una noticia que no esperaba y no pudo disimular su sorpresa y su incredulidad. El Ayuntamiento pretende crear «un espacio-mirador singular» en una zona del Valle sin tratar en la que se instalarán bancales de hormigón y baños públicos, una iniciativa que no ha caído bien por innecesaria y por tratarse «de un anuncio más vacío».
La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Noelia de la Cruz, considera que con este proyecto el equipo de Gobierno municipal «va a buscar problemas donde nos lo hay» y dio a entender que no es la primera vez que recurre a este tipo de iniciativas. No entiende por qué no se informa al resto de los grupos de una iniciativa que afecta a un entorno natural tan singular para Toledo.
«Mucho nos tememos que no tendrán capacidad para materializarlo», dejó caer de la Cruz, convencida de que se trata «de otro anuncio vacío». Además, la portavoz se lo toma con sorna y considera que este equipo de Gobierno municipal recurre desde el inicio de legislatura a este tipo de iniciativas, que acompaña también con anuncios «sobre aparcamientos disuasorios».
También el portavoz de IU-Podemos, Txema Fernández, critica que ni PP ni Vox hayan informado del proyecto antes de colgarlo en el perfil del contratante ligado a la conexión y movilidad entre el parque de Polvorines y el Valle, una iniciativa que ahora señala para la redacción del proyecto un mirador en el mismo espacio en el que se dio a conocer la posibilidad de disponer de un auditorio.
La idea. Ese 'Montmartre natural' se plantea como un nuevo lugar de esparcimiento para la ciudadanía. Para ello, está previsto construir muretes de hormigón a modo de graderío que faciliten «establecer el diálogo con la naturaleza existente». Además, cabe la posibilidad de instalar baños públicos autolimpiables, aunque no se determina la ubicación. Si bien, toda la intervención deberá contar con el visto bueno municipal y de distintas comisiones.
Sea como fuere, para el portavoz de IU el proyecto en sí resulta carente de lógica. En este sentido, Fernández aprovechó para recordar «que hay otro mirador veinte metros más abajo, en una zona humanizada del Valle». Por tanto, no entiende el empeño de Velázquez y su equipo de Gobierno en «tocar una zona natural del Valle».
Fernández tiene claro que el Ayuntamiento «se va terminar metiendo en un jaleo medioambiental y paisajístico». En este caso, el portavoz de IU-Podemos apuesta «por el adecentamiento» del mirador actual enclavado en una zona que invita a disfrutarse.
Respecto al proyecto en sí, Fernández subrayó que se encuentra enmarcado en el Plan de Sostenibilidad Turística que parte con un presupuesto de 4,2 millones de euros. «Únicamente tiene un objetivo, permitir que los hoteles ofrezcan a sus clientes la mejor oferta turística».