Cada 4 de febrero se celebra el Día Mundial contra el Cáncer, una fecha para actuar en la prevención y control de una enfermedad que, de alguna manera, a todos nos toca de cerca. Desde el Gobierno regional se insiste en la participación en los diferentes programas de cribado de cáncer –de mama, de cervix y de colon– porque quieren seguir mejorando el índice de participación. Hasta la fecha, el programa de detección de cáncer de mama alcanza una participación de más del 86%, estimándose que unas 24.000 mujeres han salvado su vida gracias a la rápida detección de tumores en su fase inicial. El programa de detección precoz de cáncer de cérvix o cuello de útero alcanza una participación del 65%; y el de colon del 63%, según los datos facilitados por la Consejería deSanidad.
El cribado es lo que se conoce como prevención secundaria. La primaria, explica a La Tribuna la jefa del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Toledo, Eva María Lozano, corre por cuenta de la persona, es decir, prestar atención a nuestro cuerpo, cuidarnos, tener una alimentación saludable, hacer ejercicio físico y evitar el alcohol y el tabaco. «El estilo de vida es lo que más impacto tiene en la supervivencia de una persona, tiene una importancia vital», sostiene.
Respecto al cribado, la doctora Lozano recuerda la importancia que tiene el diagnóstico precoz de los tumores, pues incrementa muchísimo la probabilidad de curación y tiene impacto, a su vez, en la calidad de vida del paciente, porque «no solamente es curarse sino en qué condiciones quedas cuando te curas».
Grandes avances. Como oncóloga radioterápica, su centro de acción es el tratamiento de tumores. En este área se han producido grandes avances en la última década, celebra. «Hoy tenemos equipos de tratamiento radioterápico que permiten tratar pacientes que hace unos años era impensable, con ninguna secuela y con unos resultados en salud excelentes».
Recuerda que Castilla-La Mancha tiene una población muy envejecida y el cáncer es un problema de salud importante y, en este sentido, también «son muy importantes las inversiones». Actualmente, hay oncología radioterápica en las cinco provincias de la región y «dotada con el mejor equipamiento», lo que significa «mejores resultados en tasas de curación y menor riesgo de desarrollar toxicidad a largo plazo».
La doctora Lozano insiste en que los avances tecnológicos impactan, sobre todo, en el diagnóstico y en el ámbito de la cirugía, que «ahora son mucho menos invasivas y dejan menos secuelas». En lo que concierne a la oncología radioterápica «tenemos un equipamiento que permite dar dosis muy elevadas para controlar el tumor sin prácticamente nada de toxicidad».
Es una inversión inicial «muy importante», reconoce, pero son tratamientos «muy eficaces» que no dejan secuelas y el paciente puede recuperar su vida que «también se trata de eso». «A veces se olvida, curamos a los pacientes pero en qué condiciones los dejamos. Eso me parece muy importante y en eso la tecnología ha sido de gran importancia».