El FC Barcelona selló su pase a semifinales de la Copa del Rey este miércoles al superar (1-0) a la Real Sociedad en el Spotify Camp Nou, un duelo con dominio y ocasiones locales en su mayoría, y con el gol de Ousmane Dembélé para avanzar sobre un equipo vasco que no tuvo su mejor día y, además, jugó en inferioridad desde el 40'.
El equipo de Xavi Hernández alargó su aventura copera, otra opción de título tras ganar la Supercopa de España hace dos semanas, con un Dembélé que dio mucho trabajo a la defensa rival e hizo el tanto de la victoria en el minuto 52. El cuadro culé fue fiel a su versión reciente, en intensidad y buscar la meta rival, pero le faltó efectividad, como también le viene pasando.
La falta de sentencia no la aprovechó una Real que creyó a pesar de la roja a Brais Méndez, por una entrada a Busquets, tras aviso del VAR. El equipo de Imanol Alguacil se vio superado por la presión azulgrana, muy lejos de la meta rival además para meter miedo a Ter Stegen. Con todo, Take Kubo se estrelló con el larguero y, en la segunda parte, lideró minutos vascos con ocasión para Sorloth.
La racha donostiarra de nueve victorias seguidas puso fin en el Camp Nou en gran parte por Dembélé. El galo cumplió en su continuo uno contra uno, saliendo con velocidad también cuando la Real quiso irse arriba. Mientras, Lewandowski estuvo bien vigilado, con cierto pique por su falta de protagonismo y quizá con el hervor del reencuentro con Gil Manzano, el árbitro de su sanción en Liga.
El ataque local pasó más por las llegadas de Gavi y Pedri desde segunda línea, de las que está sacando partida Xavi, del mismo modo que Balde subió mucho por banda izquierda. Con el añadido de Frenkie de Jong, la superioridad culé en el centro del campo fue total y, así, se fueron sucediendo las ocasiones locales. El equipo 'txuri-urdin' generó peligro con poco, como ese larguero de Kubo a la media hora, que sirvió a los visitantes para abandonar la cueva.
Con las fuerzas igualadas llegó la expulsión de Brais, a la que respondió con valentía la Real para no volver a encerrarse. El Barça siguió con la mirilla desviada, con algo de excusa Koundé por no ser su mejor faceta. El central tuvo sendas entre uno y otro tiempo, pero Dembélé trajo entonces la calma, en una conducción que apuntaba a pase para Lewandowski y sorprendió a Remiro con el disparo.
El 1-0 de nuevo despertó el orgullo de la Real, con Barrenetxea y Kubo merodeando el área rival. El japonés puso un balón de gol a Sorloth que sorprendió al propio ariete noruego y la bronca de Xavi en la banda recordó a los locales la necesidad de tener el balón y sentenciar. El Barça cumplió a medias, porque no sufrió en exceso y mantuvo su dominio, pero la tranquilidad no llegó.
Dembélé se llevó la ovación del Camp Nou y el feudo azulgrana, donde lleva 32 años sin ganar la Real, contuvo la respiración por un error de Ter Stegen, que enmendó salvando el mano a mano con Robert Navarro. Olasagasti obligó a otra del alemán y los de Alguacil, pese a las bajas, se despidieron con la cabeza alta, aunque el Barça fue quien se metió en el sorteo de semifinales del lunes.