Fusionar mundos. El título traducido al castellano de la exposición define a la perfección lo que quiere transmitir la exposición. Un choque artístico entre el patrimonio desconocido de las Cuevas de Hércules y las obras pictóricas de una artista contemporánea como Kelly Fischer. Sus obras, según la propia artista, son «un caos en los ojos de los demás» y un puzzle a completar en los suyos. «Una mezcla de ingredientes que solo yo sé dar sentido» dice la artista y que ya ha mostrado, antes que en Toledo, en las galerías de Nueva York o de Sevilla, entre otras. De hecho, la artista asegura que la exposición ha llegado a Toledo porque elige ciudades que tengan que mucho arte que ofrecer. Algo que desde el Consorcio agradecen. Su gerente, Jesús Corroto, afirmaba en el acto de inauguración que se trata de «una revolución en el mundo del arte» y, además, atraerá turismo internacional.
La artista ha estado acompañada por el consejero de Cultura y Ciencia de la embajada de Suiza en Madrid, Alberto Giovanetti. Y este ha calificado la exposición como un tesoro. «Me habían comentado leyendas sobre este lugar, y sobre los tesoros que guardaba, ahora lo he podido confirmar» decía Giovanetti en referencia a la mezcla de culturas que ha juntado el escenario del Consorcio.
La autora Kelly Fischer se ha mostrado encantada con la ubicación y ha asegurado que le servirá de inspiración para futuras obras, debido a que, según ella, sus obras plasman sus vivencias personales. Y es que al igual que la mezcla de la exposición le ha llamado la atención a la propia artista, Jesús Corroto considera que causará el mismo efecto entre el espectador. Cree que no es habitual un contraste tan llamativo de estilos, al ser las obras pictóricas expuestas de un cáracter «abstracto contemporáneo, que trae tendencias cosmopolitas norteamericanas, a las que el consumidor toledano no está acostumbrado». La exposición 'Fusion worlds' se mantendrá en las Cuevas de Hércules hasta el próximo 6 de noviembre.