Se suele decir que la sangre de los mártires generan la semilla de nuevos cristianos. Un ejemplo de ello lo ha vivido este lunes el barrio de Santa Bárbara. La historia de una mártir congregó a centenares de personas en la parroquia del barrio.
Tras la solemne misa a la que no pudo acudir el alcalde Carlos Velázquez por motivos de agenda, la imagen de Santa Bárbara salió de la Iglesia a hombros de unos pocos fieles para cambiar las andas por la carroza en la puerta de la misma, no sin antes ser homenajeada con el himno de España, con una tanda sonora de petardos y con unos cuantos 'vivas' en su honor por parte de los vecinos.
Los centenares de personas que acudieron a la cita siguieron a la imagen por el recorrido que la hermandad hace por el barrio, custodiada por una banda de música, luces de navidad y mucha ropa de abrigo para protegerse del frío.
Santa Bárbara, mártir de su barrioUnos metros por detrás de la talla de Santa Bárbara asistía la representación de la Corporación Municipal, con José Vicente Toledano y Juan José Alcalde como representantes del equipo de Gobierno y con Nuria Garrido y Teo García como concejales del Grupo Municipal Socialista.
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La misa acogió a un gran número de vecinos.
La imagen es portada en hombros hasta la puerta de la parroquia.
Tras el recorrido por el barrio, los vecinos de Santa Bárbara pusieron fin a la velada que homenajea a su patrona con la habitual rosca. La sangre de los mártires crean nuevos cristianos y estas celebraciones hacen perdurar sentimientos y tradiciones.