Dos grandes asuntos y múltiples reivindicaciones eternas sobre la mesa. El alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez, se reunió el pasado lunes con la Asociación de Vecinos La Candelaria y les puso sobre la mesa su proyecto de puente entre Polígono y Azucaica. Esta, por su parte, le comunicó en persona que entiende que este puente «no va a ser la solución para los atascos del Polígono». No conecta con la AP-41 y sale a una zona en la calle Río Jarama que es conflictiva y puede ser un nuevo «cuello de botella».
Además, explica el presidente vecinal, Víctor Fernández Jara, aunque el Ayuntamiento hable de «calle», él entiende que se trata de una «carretera», que carece incluso de aceras. En el caso de que el proyecto salga adelante, apuntó el responsable vecinal, para Azucaica sería bueno que la conexión tuviera un carril bici (que de momento solo se contempla en el puente) y una acera, para poder ir andando o sobre dos ruedas al Polígono. Los vecinos finalmente también se interesaron por la financiación del proyecto, a lo que el Ayuntamiento no les supo dar respuesta.
Canalización del arroyo. Además del puente, sobre la mesa hubo muchos otros asuntos pendientes en el barrio que, se lamenta Fernández Jara, no terminan de solucionarse nunca. Son cuestiones como la pista de fútbol, que necesita un arreglo integral y ya no tiene ni vallas. La iluminación y los parques son otras cuestiones pendientes.
Pero también hay muchos problemas relacionados con la canalización del arroyo Lazo; cuestiones como los hundimientos en el camino de la Huerta, o el arreglo integral del centro cívico. Los vecinos apuntan que este último no se debería hacer hasta que se canalice el arroyo «porque dinero que inviertas, lo vas a peder», pero piden que de momento se eliminen las goteras «porque se usa todos los días y el moho es malísimo para la salud».
En respuesta a esto, Velázquez apuntó que el Ayuntamiento iniciará en noviembre la construcción de un gran arenero, una enorme piscina junto a la carretera, para que se deposite la arena allí y no obstruya las canalizaciones, lo que está causando que salten las arquetas.
Sin embargo, vecinos y Ayuntamiento son conscientes de que la solución viene por canalizar de nuevo el arroyo, algo que Velázquez quiere hacer por la calle Cañada y la zona de las 'antiguas escuelas'. Es un proyecto sin fecha, porque habrá que contar con los permisos pertinentes, dado que se utiliza una cañada real. Lo quiere dejar hecho esta legislatura. Para la Asociación sería una solución perfecta, «lo que seguimos buscando desde hace más de cincuenta años, la desviación y canalización del arroyo».