Cáritas diocesana de Toledo ha presentado la campaña de Navidad 2024 en la que piden la colaboración para ayudar a las personas en exclusión. Arranca los días 13, 14 y 15 de diciembre en el supermercado Alcampo Toledo con la tradicional recogida de alimentos. Los artículos que se pedirán serán galletas, azúcar, cacao en polvo, legumbres, conservas, tomate frito y aceite de girasol, así como productos de higiene personal y de limpieza.
El director de Cáritas, José Luis González, la secretaria general, Mónica Moreno, y el administrador, Ramón Martín, explican que bajo el lema 'Navidad también es estar cerca de quién nos necesita' siguen el mandato del Papa de trabajar por una Iglesia para servir a los más necesitados y dar respuesta a situaciones de exclusión que sufren mujeres, familias, ancianos, niños o desempleados, es decir, «ser Iglesia de y por los pobres».
En la presentación han participado Yelicruz y Waldo, un matrimonio de Venezuela que llegó a Cáritas este año 2024 porque estaban sin casa y sin medios para mantenerse. Cuentan que tras recorrer otros lugares llegaron al Centro Santa Teresa de Calcuta de Toledo (centro de Cáritas Toledo) donde le facilitaron el pago de un hostal hasta que pudieron entrar en los pisos de urgencia de la entidad. Buscan trabajo y emprender una nueva vida llena de esperanza.
El director de Cáritas ha explicado que este año el objetivo es poner en valor el trabajo de acompañamiento y cercanía de los agentes de Cáritas y «tocar el corazón» para animar a la donación y a hacerse socio de Cáritas Diocesana de Toledo.
«La Navidad es una ocasión para poner de manifiesto nuestro compromiso con la caridad, la generosidad y el encuentro con los demás. Y es también momento muy especial para dar gracias a todas las personas e instituciones que de diferentes modos han contribuido con la misión de Cáritas de estar cerca y al lado de personas que sufren las consecuencias de la injusticia, la pobreza y la exclusión social», señala José Luis González.
La secretaria general, Mónica Moreno, manifiesta que en este año 2024 en los distintos programas de Cáritas «la angustia se ha hecho un hueco», por no poder atender todas las peticiones de ayudas económicas, la falta de vivienda y la carencia de un empleo digno.
También ha hecho una radiografía de situación en cada una de las áreas de acción social de Cáritas Diocesana de Toledo. En Hogar 2000 se han encontrado con situaciones sanitarias de extrema gravedad y de la falta de apoyos sociales y familiares en las personas que acompaña en este centro sociosanitario.
Por los centros de personas sin hogar de Toledo y Talavera hasta el mes de octubre han pasado 434 personas. En el Área de Personas sin Hogar llegan personas con bajos ingresos económicos lo que hace imposible acceder a una vivienda digna y con graves problemas de salud mental debido a los escasos recursos públicos residenciales y de atención.
En el Área de Inclusión durante 2024 se ha acompañado a 440 familias migrantes que llegan sin recursos económicos, con familiares a su cargo, y con el problema de poder dar alojamientos de urgencia a las familias que llegan. Necesitan lo más básico: techo, comida, roba, información de los recursos básicos, orientación de trámites administrativos, apoyo psicológico...
El Área de Empleo y Formación este año 2024 se atenderá a cerca de 1.000 personas. Se evidencia la necesidad de seguir impartiendo formación para adquirir conocimientos y habilidades para ejercer una formación y también se ve necesario el acompañamiento a las personas en situación de vulnerabilidad para acceder al mercado laboral, especialmente la mujer.
En el Área de Animación del Territorio más de 4.400 familias han sido atendidas. El perfil son personas migrantes, sin documentación y sin recursos económicos.las necesidades que se encuentran en las Cáritas Parroquiales son principalmente el pago de suministros, el pago de alquiler, alimentación y cobertura de necesidades básicas.
Inserta Toledo ha dado oportunidades laborales a 18 personas. Se está haciendo una labor de acompañamiento con un empleo real y digno, poniendo a las personas en el centro de las actividades.
En el Área de Familia, en todos los proyectos ha aumentado el número de demanda; con 368 personas y 140 familias atendidas hasta octubre; llegando mujeres en extrema vulnerabilidad y con problemas de salud mental y adicciones. Ha sido un año de atención a familias monoparentales que a pesar de tener un trabajo no pueden atender los gastos de alquiler, suministros, educación y necesidades básicas de sus hijos.
La colaboración privada es uno de los pilares que permiten a Cáritas llevar a cabo su misión y estar cerca de las personas que más lo necesitan, personas en situación de mayor pobreza y vulnerabilidad dentro y fuera de nuestro país. Esto es posible gracias la generosidad de socios, donantes y colaboradores privados, con 676 socios y 1.519 donantes, lo que supone el 56% del total de los recursos invertidos el año pasado.