Las carreteras del Estado, la Junta y la provincia aparecen flanqueadas por constantes señales de tráfico que anuncian la limitación de la velocidad. Hay quien se salta las normas y vuela en sus coches en un desafío a la seguridad del resto de conductores y ocupantes que cuesta caro en ocasiones por las multas y más caro aún por la provocación de accidentes mortales. En Borox y en más partes de la provincia, el desafío a las reglas se multiplica, como la organización de carreras ilegales.
El subdelegado del Gobierno en la provincia, Carlos Ángel Devia, informó ayer de que la Guardia Civil disolvió el pasado fin de semana carreras ilegales organizadas en un polígono industrial de la localidad sagreña de Borox. Los agentes se personaron en el lugar y levantaron actas de infracción a los participantes.
Devia confirmó así una información adelantada por el diario ABC y explicó que diferentes patrullas de la Guardia Civil acudieron al lugar de las carreras y «disolvieron» a los participantes. En este sentido, los agentes identificaron a los individuos que ejercían aparentemente como «cabecillas».
Al respecto, la Subdelegación del Gobierno impondrá a los infractores «sanciones administrativas», de las cuales «algunas son importantes» por la cuantía económica.
«La Guardia Civil está con el asunto, muy encima», apostilló el subdelegado del Gobierno en la provincia tras un minuto de silencio por el asesinato por violencia de género ocurrido el fin de semana en Estepa (Sevilla).
Devia detalló que «periódicamente» se organizan carreras ilegales de este tipo en otros municipios, algunos, incluso, «más cercanos» a la capital.