Poco a poco se va completando el puzzle de la plantilla del CD Toledo y el último en llegar a la entidad verde es un zaguero. Se trata de Rubén Garcés, un central procedente del Huesca que también puede actuar como lateral derecho y cuya presencia añadirá competitividad a la retaguardia capitalina.
En principio, el jugador aragonés (Huesca, 7 de noviembre de 1993) contará con licencia sub 23, lo que supone una notable ventaja, pero se le considera un integrante importante de una zaga en la que peleará por un puesto junto al resto de integrantes. Se le considera, además, una de las piezas importantes gracias a su polivalencia, ya que puede actuar en dos puestos en los que el secretario técnico, Txema Indias, necesitaba refuerzos.
Entre sus cualidades, destaca por su gran capacidad física, ya que mide 1,84 metros, y cuenta con una buena disposición para dominar el juego aéreo. Asimismo, posee un gran golpeo de balón, por lo que asegura al equipo una buena salida de la pelota en largo desde atrás.
Con su incorporación, la retaguardia estaría compuesta hasta el momento por Morales en el lateral derecho, Tete en el izquierdo, y Pedro y Toño Vázquez como centrales. Dado que Garcés puede actuar tanto en el eje como en el costado, y Valín puede simultanear su presencia en la medular con la defensa, el objetivo se centraría en la contratación de un zurdo que pueda actuar en el ‘carril del 3’ y del que no se desdeñaría su vocación ofensiva.
Lo que falta. Conforme se van cerrando incorporaciones y renovaciones, los huecos en la plantilla capitalina se van reduciendo para posibles fichajes. Lo que está claro es que la lista de la compra de los verdes cuenta con varias prioridades entre las que destacan un mediocentro y futbolistas de banda.
En este sentido, el jugador que se persigue para la medular es un hombre creativo, capaz de organizar el juego del equipo. Asimismo, en los extremos se quiere añadir desequilibrio, una seña de identidad del CD Toledo del curso pasado y que abanderaban Aguirre o Urko Arroyo, ambos fuera de la plantilla en este momento.
Y es que, en el caso de este último sigue sin dar una contestación sobre su renovación y, como es lógico, la secretaría técnica está trabajando para que la decisión, independientemente de si resulta positiva o no, no les pille por sorpresa.
Además de estas posiciones en las que el cuadro verde se encuentra un poco más cojo, se persigue en el mercado la incorporación de un delantero que acompañe a Rufino y Rubén. A estas posibles contrataciones habría que añadir el mencionado zurdo para la defensa y, si Perales actúa de forma usual con el filial de Tercera, otro cancerbero.
Con todo, se está trabajando con paciencia porque queda margen de espera hasta que comience una pretemporada que se prevé que dé inicio a mediados de mes.