Sonia Labrado acabó en una meritoria séptima posición en el Cross Espada Toledana. La capitalina del Bikila sufrió en el inicio con el alto ritmo impuesto, pero poco a poco se fue rehaciendo para recuperar algunos puestos y cerrar su participación en Safont con un buen resultado.

Y es que la deportista toledana admite que «sabía que el nivel iba a ser más fuerte que otros años, porque las rivales que han venido son bastante fuertes». Asimismo, Labrado era consciente de que «el ritmo iba a ser fuerte desde el comienzo, porque Alessandra Aguilar está en un gran estado de forma».

Por ello, la decisión de la atleta del Bikila fue «regular un poco, porque tenía un poco de flato, y me ha costado bastante». Sin embargo, Sonia Labrado fue mejorando conforme avanzó la carrera porque tuvo «fuerzas para coger a otras chicas». Ello le permitió entrar séptima en meta y acabar «feliz y contenta, porque he podido disfrutar».

Y es que la toledana resalta el aliento que recibió por parte de los aficionados que se desplazaron hasta el circuito de Safont para seguir la competición: «El apoyo del público es genial en todo momento, porque no paran de animar, y eso se agradece mucho».

Sensaciones. Después de que en Atapuerca acabó «bastante mal, porque no me sentí bien desde el principio», Sonia Labrado apunta que la semana previa a la Espada Toledana «sí ha sido muy buena». Desde su punto de vista, «no he bajado el entrenamiento, porque estamos al principio de temporada». En cuanto a objetivos, se plantea correr los 10 Kilómetros de Castellón, pero «está aún por ver». En cualquier caso, su intención pasa por alternar las pruebas de ruta con el cross durante el invierno.