Pilar Gil Adrados

Entre Encinas

Pilar Gil Adrados


Treinta y cuatro

06/06/2024

Me he decidido a votar por correo para evitar que la pereza me venza en el último momento, perdiéndome la oportunidad de expresar mi opinión cuando se trata de tomar relevantes decisiones colectivas.
Parece probable que, en estas elecciones europeas cuya celebración no coincide con las nacionales ni con las regionales y locales y que, además, llegan tras varios procesos electorales agotadores en nuestro territorio, la participación será menor. Sin olvidar la consabida baja implicación de los ciudadanos europeos en estos comicios, quizás porque a los partidos políticos les cuesta, o no les interesa, salir del terreno y de la competición nacional para enfocar sus campañas hacia Europa.
Así que no he dudado en corresponder como ciudadano al esfuerzo que hacen nuestros políticos, rivalizando sin desmayo con proyectos que responden a nuestros desvelos y afanes europeos. De verdad que no caí en la cuenta de la dimensión de la proeza, hasta que recibí el sobre con la documentación que, puntualmente, me remitió Correos. Entre los documentos, un talonario con las papeletas de votación de todas las candidaturas proclamadas que, a primera vista, confundí con una libreta publicitaria por su grosor.
Me pudo la curiosidad, claro está, y me puse a estudiar el caso. Son treinta y cuatro las formaciones políticas que concurren en España a las elecciones al Parlamento Europeo, a las cuales, si el reparto fuera lineal, les tocaría menos de uno de los 61 escaños españoles de los 716 que componen el hemiciclo europeo. Pasamos de 54 a 59 eurodiputados, cuando al retirarse Reino Unido de la UE en febrero de 2020, se repartieron 27 de sus 73 escaños. Y en 2023, se nos asignaron 2 más, al decidir la Eurocámara una ampliación de 11 escaños para adecuar la representación a los cambios demográficos.
También es verdad que estas 34 candidaturas son cinco menos de las que se registraron en 2014, tiempo de crisis económica que propició nuevas formaciones políticas. Pero, esta vez, hay unas cuantas que representan a las zonas rurales y a intereses locales españoles: Teruel Existe, Soria ¡YA!, Pais i Moviment Rural, La España olvidada existe, Soberanía Alimentaria Española, Ahora Andalucía, Juntos por Extremadura, Extremeños Prex Crex, Partido Galego, o Salamanca-Zamora-León Prepal que, aunque lograran superar el umbral del 3%, es poco probable que puedan constituirse en un grupo político, no solo porque es difícil que obtengan los 23 escaños necesarios, sino porque para ello deberían representar al menos a la cuarta parte de los Estados de la UE. Tendrán que agruparse, si coinciden con su afinidad política, en alguno de los siete grupos políticos que, ahora, hay en el Parlamento Europeo o bien figurar como no inscritos.
Si embargo, según algunos analistas, casi la mitad de los escaños del Europarlamento estarán ocupados por eurodiputados que no pertenecen a la coalición de los grupos que suelen dominar el debate parlamentario, por lo que se esperan cambios en los grupos políticos y en las coaliciones que repercutirán en la agenda política y en la futura legislación de la UE.