La karateca talaverana Sandra Sánchez habló de las adversidades que se ha encontrado en el deporte. De hecho, de pequeña, sus padres la apuntaron a baile porque era chica, y a su hermano a kárate. «Era mi referente, y yo quería estar con él», dijo. 

Asimismo, cree que se están dando «pequeños pasos» para la igualdad en el deporte, aunque insistió en que lo más importante no es la medalla, «sino todo lo que hay detrás, y es importante conocer el camino que hay hasta el podio». Desde su punto de vista, a veces las mujeres necesitan «ser las mejores o conseguir un oro olímpico para tener valor mediático».

Esa parte oscura que hay detrás piensa que es algo que «en realidad interesa a la gente», y, al preguntarle por cómo ve el futuro de la igualdad en el deporte, la campeona olímpica reconoció que «con un proyecto común entre hombres y mujeres, porque la energía de todos juntos suma el doble». 

Finalmente, añadió que el problema de la discriminación es «una suma de circunstancias», y abogó por trabajar en el ausentismo que sufre el colectivo femenino en la adolescencia: «Somos débiles mentalmente y estamos sometidas a una presión social, y eso hay que ir cambiándolo».