No pudo Irene Sánchez-Escribano apoderarse de su séptimo título nacional de los 3.000 obstáculos. La toledana cuajó una carrera notable, pero tuvo por delante a una Carolina Robles excepcional que se quedó esta vez con el oro. A falta de dos vueltas, la sevillana sacó una ventaja que fue definitiva, aunque la corredora del Adidas no se dio por vencida y al final esprintó para pelear ese primer cajón del podio.
Lo peor es que tampoco prosperaron los intentos de alcanzar la mínima para el Campeonato del Mundo del próximo mes de julio en Eugene (Estados Unidos). Robles venció con 9:32.24, mientras que Irene Sánchez-Escribano registró 9:32.40. Una marca magnífica representa la mejor de la temporada para la toledana, aunque ambas tendrán que esperar a la clasificación mundial para alcanzar una plaza en la prueba norteamericana.
Hay que decir que la carrera fue frenética, con mucha emoción, y dejó otras buenas noticias, como la tercera plaza de otra atleta entrenada por Antonio Serrano, Marta Serrano, que acabó en el podio con 9:48.64, un registro que supone récord de España Sub 20.
La toledana salió liderando la prueba, a una velocidad considerable, para intentar castigar mentalmente a sus rivales, y también porque esta prueba era la última opción de conseguir la mínima para el próximo Campeonato del Mundo.
Evidentemente, Carolina Robles asumió ese ritmo de la corredora del Adidas porque tenía los mismos intereses. Se repartieron la cabeza de carrera en cada vuelta para intentar entrar por debajo de esos 9 minutos y 30 segundos que aportaban el billete para Eugene.
A falta del último mil, la sevillana atacó a Irene Sánchez-Escribano. La sacó unos metros, pero de cara a la vuelta final, a pesar de acercarse, la toledana se quedó sin opciones de oro. Más que nada porque Carolina Robles no cedió en su marcha hacia la primera posición. El esprint final no sirvió para nada, ni siquiera para conseguir la mínima