Hace años que los inquilinos de las 148 Viviendas de Río Yedra, en el barrio del Polígono, vienen denunciando que el tráfico de drogas y la inseguridad es el pan suyo de cada día, una situación que empeoró todavía más cuando durante el confinamiento de 2020 se ocuparon varios inmuebles vacíos, cuyo desalojo está en proceso judicial (recientemente se suspendieron 17 juicios porque los okupas no llevaron abogado). Un ejemplo que viene a confirmar esto es lo ocurrido el pasado miércoles en el centro de la urbanización, a plena vista de todo el mundo.

Una persona con coleta, vestida de negro, machete en mano, comenzó a amenazar a una familia que se encontraba en esos momentos asomada a las ventanas de su casa. Según cuentan los residentes, se trata de un enfrentamiento entre familias okupas. Los hechos ocurrieron sobre mediodía, cuando esta persona sacó un machete y comenzó a proferir gritos hacia la familia que estaba en un balcón del portal 6. A su lado iba un niño menor, de ocho o nueve años, con la funda en la mano. La acompañaba una joven, que acabó forcejeando con esta persona para quitarle el machete, cosa que consiguió finalmente.

El Cuerpo Nacional de Policía confirma que varios efectivos se acercaron sobre la una y media, avisados de una pelea de diez personas, pero cuando llegaron, solo encontraron un grupo tranquilo. No hubo heridos, ni denuncias. Los vecinos cuentan que tras lo ocurrido, hubo un grupo del entorno de la persona que mostraba el machete «montando guardia» y que del otro portal no salió nadie. Tampoco se atrevieron a salir el resto de vecinos, atemorizados por la situación «no sea que te toque algo».

Amenazas con machete en entre los okupas en las 148 Viviendas Reclamaciones. Los inquilinos legales siguen reivindicando su derecho a una vida tranquila y piden a Gicamán que dejen de mandarles cartas resumiendo sus deudas y ponga fin a esta situación, que además es la que está causando tantos destrozos en la promoción. A falta de otra solución, piden que se reubique a los inquilinos con contrato, primero, a los que no deban dinero, «porque a los okupas no los van a echar».