Las obras de la nueva depuradora y su colector conviven con los restos

Susana Jiménez
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Acuasur asegura que las excavaciones siguen en marcha, siguiendo las pautas marcadas desde el Gobierno regional

Las obras de la nueva depuradora y su colector conviven con los restos

Los trabajos de construcción de la nueva Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Estiviel avanzan según lo previsto, al igual que sucede en uno de los colectores previstos, mientras que en el segundo, donde se localizaban hace unos meses restos arqueológicos de gran relevancia, prosiguen las excavaciones siguiendo las pautas indicadas por el Gobierno regional. Así lo confirmaban a La Tribuna fuentes de la empresa pública Aguas de las Cuencas del Sur S.A. (Acuasur), las cuales subrayaban que los trabajos prosiguen «con normalidad».

Unos trabajos que daban comienzo la pasada primavera, y que tienen como objetivo la construcción de una nueva depuradora que permita satisfacer las necesidades que en materia de depuración se han creado en Toledo con motivo de los desarrollos urbanos e industriales que han ido surgiendo en los últimos años.

La nueva EDAR está diseñada para tratar un caudal medio de 36.000 metros cúbicos diarios, y dar servicio a una población de 270.000 habitantes equivalentes. Esta nueva infraestructura contará con un tratamiento biológico avanzado y de eliminación de nutrientes, lo cual permitirá cumplir con los objetivos de calidad del río Tajo en zonas sensibles. Para ello está previsto invertir 19,9 millones de euros, que serán financiados por el Fondo FEDER de la Unión Europea.

Asimismo, el proyecto se completa con la ejecución de un nuevo colector, que tendrá una capacidad de transporte de 4 metros cúbicos por segundo, y una longitud de 6 kilómetros, a través del cual se llevarán las aguas residuales a la nueva EDAR. Unos trabajos que conllevan una inversión de 9,3 millones de euros.

Cubrir los restos. Precisamente durante estos trabajos para la construcción del colector aparecían importantes restos arqueológicos, entre los que se encuentran vestigios de una necrópolis romana y visigoda, así como restos prehistóricos.

Según ha podido saber este periódico, la Dirección General de Cultura aún no ha recibido el informe definitivo de los arqueólogos, aunque todo apunta a que finalmente se optará por cubrir los restos temporalmente, con el objetivo de preservarlos, y aplazar una posible intervención más adelante.