Es un ritual que cada año se repite, pero que este año ha resultado un tanto accidentado. El mayordomo, un experimentado Antonio Batres, se ha dirigido a caballo a la Puerta Noble del Ayuntamiento a las cinco de la tarde, pero no ha podido cumplir con la tradición, porque el animal se ha asustado ha empezado a retroceder y, ya retirado, ha doblado las patas traseras hasta hacerle caer al suelo.
El jinete se ha recuperado con rapidez y aunque ha intentado volver a montar, finalmente y ante los extraños que seguía haciendo el caballo, ha acabado por desistir y se ha dirigido a pie a la puerta, mientras sujetaban al animal. El mayordomo ha llamado y el alcalde, José Julián Gregorio, le ha abierto y le ha colocado la bandera, dando así la señal de arranque del cortejo.
El gesto de Batres ha sido correspondido con un gran aplauso por el público asistente cuando ha pasado ya montando al caballo como parte del cortejo. Antonio Batres tiene una gran experiencia como jinete y como mayordomo de Mondas, papel en el que nunca había sufrido un incidente similar.