El Real Madrid sumó en San Mamés ante el Athletic Club (2-1) su quinta derrota de la temporada en 22 partidos. Además, tres empates ponen de relieve el irregular inicio del conjunto blanco. En las últimas 10 campañas, solo en una ganó menos a estas alturas: en la 2018/2019, la primera tras la marcha de Cristiano Ronaldo.
En aquella ocasión sumó nueve duelos sin llevarse los tres puntos. En la actual, ocho, como en la 2019/2020 y en la 2020/2021.
En 2020 logró ganar la Liga, en la edición interrumpida por la pandemia del coronavirus, y fue eliminado en octavos de la Liga de Campeones. En 2021 fue subcampeón del torneo doméstico y cayó en semifinales de Champions ante el Chelsea, a la postre, campeón.
Una competición continental en la que en la actual campaña ha registrado su peor inicio desde que se la conoce como Liga de Campeones, en 1992. Tres derrotas en cinco partidos para iniciar un nuevo formato de liguilla entre todos los participantes y que incluye dos jornadas más.
Además, se añade un cambio en el formato de clasificación para las eliminatorias. Los ocho primeros clasificados, directos a octavos, y los 16 siguientes a una ronda extra de dieciseisavos para ganarse un puesto en la siguiente fase; y de estos, el Real Madrid, con tres jornadas por disputar, es 24º. Al límite.
Un escenario que no le ha llegado al conjunto de Carlo Ancelotti en Liga, ya que se repuso de la goleada 0-4 sufrida ante el Barcelona, hasta que llegó a San Mamés.
El Real Madrid fue superado ante un Athletic que jugó a gran intensidad frente a su público. Aunque, eso sí, los merenguesse fueron de vacío por dos errores: el penalti fallado -el segundo consecutivo tras el de Anfield- de Kylian Mbappé y un error en la salida de balón de Fede Valverde con empate a uno en el marcador y que terminó siendo el 2-1 definitivo.
Es una derrota que supone la segunda del curso en el campeonato nacional, tras la del clásico. Y sumando las tres en Liga de Campeones, son cinco en total en los últimos 11 partidos. Más que en los anteriores 73 encuentros.
Es más, el Real Madrid ha perdido más del doble de choques que la pasada temporada (dos), en una campaña que el propio Ancelotti reconoció recientemente que fue la más fácil de gestionar en su dilatada carrera como técnico y que acabó con doblete de Liga y Champions.
Lille, Barça, Milan, Liverpool y Athletic son los verdugos de un Real Madrid que no encuentra la regularidad. En 2018, tras la marcha de Cristiano. En 2024, tras la de Kroos, las lesiones -24 en 14 futbolistas- y los errores de Kylian Mbappé.
Tras recuperar el rumbo en Liga, recortando puntos a un Barcelona al que ahora ve a cuatro, eso sí, con un partido pendiente de disputar los blancos, en Mestalla ante el Valencia, vuelven las dudas a un Real Madrid que visita al Girona mañana y que el próximo martes tiene un partido trascendental en Liga de Campeones.
Aún en diciembre, pero sin poder permitirse un tropiezo que le saque de las posiciones de acceso a la fase de eliminatorias, el conjunto blanco visitará la siguiente semana en Bérgamo a un Atalanta en racha: segundo en la Serie A y quinto en la Champions. Será la tercera visita de entidad para un Real Madrid que no encuentra la regularidad.