El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha afirmado este lunes que una ofensiva militar por parte de Israel contra Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, "no sería un pícnic" para los militares israelíes, horas después de que Israel haya reclamado a los residentes en los barrios orientales de la ciudad que evacuen la zona.
"Cualquier operación militar en Rafah no sería un pícnic para el Ejército fascista de ocupación y nuestra valiente resistencia, liderada por las Brigadas Ezzeldín al Qassam -brazo armado del grupo-, está totalmente preparada para defender a nuestro pueblo, derrotar al enemigo e impedir que logre sus objetivos", ha dicho.
Así, ha manifestado que "los pasos dados por el Ejército terrorista de ocupación como preparativo para el ataque contra Rafah, que cuenta con cerca de 1,5 millones de residentes y desplazados, y su advertencia para que la población evacue la zona oriental entre continuos ataques con artillería y bombardeos que han causado masacres de civiles inocentes, es un crimen que confirma la insistencia del gobierno terrorista de (el primer ministro de Israel, Benjamin) Netanyahu para continuar su guerra de exterminio".
"Pedimos a la comunidad internacional que adopte acciones urgentes para detener este crimen, que amenaza las vidas de cientos de miles de civiles indefensos, incluidos niños, mujeres y ancianos", ha señalado el grupo en un comunicado, recogido por el diario Filastin, vinculado a Hamás.
"Reclamamos también a las organizaciones y organismos humanitarios, encabezados por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), que sigan en sus puestos en la ciudad de Rafah y que no la abandonen ni se plieguen a la voluntad de la ocupación fascista", ha remachado.
En esta línea, Izat al Risheq, alto cargo del brazo político del grupo, ha argumentado que "cualquier operación militar contra Rafah pondría en riesgo las negociaciones" para un alto el fuego, antes de incidir en que Netanyahu y su gobierno "asumen todas las responsabilidades" de una ofensiva contra la ciudad, en la frontera con Egipto.
El Ejército de Israel ha pedido a primera hora del día a los palestinos abandonar "inmediatamente" los barrios de la zona oriental de la ciudad de Rafah, situada en la frontera con Egipto, ante una inminente ofensiva en la que las tropas israelíes "usarán una fuerza extrema contra organizaciones terroristas" en las zonas residenciales.
La comunidad internacional se ha opuesto tajantemente a esta operación, sobre la que las autoridades israelíes llevaban advirtiendo desde hace semanas, debido a que sirve de refugio para cerca de 1,4 millones de palestinos que han huido desde otras zonas del enclave. Incluso Estados Unidos ha mostrado su reticencia al plan israelí al considerar que no había forma segura de llevar a cabo esta campaña de evacuación, aunque no se ha pronunciado sobre este nuevo anuncio.