José María San Román Cutanda

A Vuelapluma

José María San Román Cutanda


El 'Efecto Sánchez'

29/05/2023

Increíble. Absolutamente increíble. Partido de fútbol con sabor a clásico. Arbitra España. El reto de España se juega en las urnas autonómicas y locales. El día en los colegios electorales estaba envuelto de incógnita. Y, de repente, el 'Efecto Sánchez'. Un fenómeno impresionante, el nuevo 'Efecto Roldán', un gol político como aquel de Nayim en el último minuto con el Real Zaragoza, un giro esperado por el contexto pero inesperado por sus cifras.
¿Qué es el 'Efecto Sánchez'? Ante todo, la muestra de que España pide un cambio de tendencia. No olvidemos que la política tiene entre sus adjetivos el de ser pendular. Y más, en un país como el nuestro, donde es muy cierto que el voto tiene una parte importante de pasión. El 'Efecto Sánchez' responde a la idea de un castigo presidencial que el votante ha comenzado a dar también en clave personal a los líderes más cercanos. Es una sensación de hartazgo por el insulto a la inteligencia del votante. Y, por supuesto, es el saldo negativo de los pactos con quienes han impreso a España de ruptura y de terror. ¿Habrá análisis interno en el PSOE? Supongo que ya lo ha habido, puesto que la convocatoria anticipada de elecciones no se ha hecho esperar. Recuerden lo de las barbas del vecino, que al final va a ser verdad que es el que elige al alcalde… Lo que toca en este momento a los presidentes autonómicos afectados y a los alcaldes de municipios principales que no han revalidado, creo yo, es pedir responsabilidades. Y, quizá, empezar a valorar a quienes han salido victoriosos de entre sus filas, porque un barón en concreto es el gran ganador por sí mismo, pero sobre todo por acabar con los oponentes que le estaban meneando el sillón.
Además, y esto es quizá una opinión atrevida, este 'Efecto Sánchez' debería ser estudiado en las asignaturas de Publicidad, pues no deja ser sino una importante amalgama de muchos pequeños defectos publicitarios del gabinete de Sánchez en la que, sin lugar a duda, han tenido mucho que ver las redes sociales por la rapidez con que han difundido tantas y tantas cosas. Recordemos a aquella parejita de jóvenes madrileños que se supone que no conocían de nada a su invitado de café y sofá, o a aquellos ancianos que jugaban a la petanca con un político con el que supuestamente nadie tenía relación.
Ahora bien, no nos confundamos. El giro a la derecha que se ha dado en España también tiene su contraprestación. Y una contraprestación que puede pagarse muy cara si no se cumple con lo prometido. El español que votó el 28-M exige al gobernante lo mismo que le va a exigir el 23-J: que se deje de ideologizar, se remangue y se dedique a trabajar desde la gestión. Y, sobre todo, que enmiende todos los destrozos que los socios de Sánchez han impuesto a golpe de decretazo. Si no cumple con esta máxima, la derecha estará condenada a volver a empezar de cero. Y no siempre se puede resetear.