El Ayuntamiento de Bargas acaba de iniciar, a través de la empresa Gosadez SL y por un importe de 57.355 euros, impuestos incluidos, las obras de restauración de los colectores de saneamiento general de la localidad que circulan en paralelo al arroyo Carrasco o de las Zorreras dentro del término municipal de Toledo. Se trata de una infraestructura que arrasaron por completo las aguas de la última Dana, lo que estaba provocando un vertido de aguas fecales que han estado causando malos olores para el barrio toledano de Valparaíso. El plazo de ejecución previsto es de dos meses, y la garantía de un año.
El colector objeto de la actuación recoge las aguas fecales de las urbanizaciones de Santa Clara y Las Perdices. La riada desplazó frente a la parroquia de Valparaíso unos 40 metros de tubo de hormigón de 40 centímetros de diámetro. Además, la erosión correspondiente de la parte lateral del cauce del arroyo llegando hasta el colector y el pozo de saneamiento descolgó otros 20 metros lineales de tubos de hormigón de 60 centímetros de diámetro interior. Además, la modificación y erosión del cauce favorece que el arroyo continúe erosionando en dicha zona ocasionando daños a la canalización de saneamiento y pozo.
En la primera zona, se están desarrollando trabajos de desatranco del saneamiento que puede haber arrastrado arena, rocas y demás dentro de la canalización; la limpieza manual y recuperación de los tubos no dañados, para su recolocación en su posición; reposición de tubos que estén rotos, incluyendo las juntas de caucho nuevas en todos los tubos recuperados; excavación de zanja por medios mecánicos y colocación de todos los colectores en su posición anterior; y reposición de tapas de los pozos de hormigón que se ha llevado la Dana debido a la saturación del colector. En la segunda, las actuaciones quieren evitar la continuidad en la erosión del borde del cauce en este tramo, reconsiderando una regeneración del terreno, para aumentar la protección de la tubería; así como la reposición del tramo de tubería, y a conseguir la continuidad del colector. Los trabajos aquí tendrán una longitud aproximada de 46 metros, de los cuales unos 30 consistirán en proteger la tubería que, aún en servicio, se muestra al borde del colapso y otros 16 metros que será necesario reponer dando continuidad al colector en su funcionamiento normal.
Fin a los olores. El inicio de esta obra es una buena noticia, sobre todo de cara al verano, para los vecinos de Valparaíso, que han estado aguantando malos olores desde la ruptura de la infraestructura. La edil de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Toledo, Loreto Molina, se ha felicitado de que por fin hayan comenzado las actuaciones y que vayan a buen ritmo.
Nada más conocer la procedencia de estos malos olores desde vecinos del entorno agrupados en la Asociación Río Chico, Molina comenzó a reclamar una solución a Bargas, «y desde el momento en el que lo dije, se pusieron manos a la obra». El problema ha sido que al tratarse de un arreglo de importancia, la tramitación se ha retrasado, dado que la contratación ha tenido que cumplir con todos los requisitos legales. A partir de la pasada semana, comenzaron las actuaciones.