Concepción Sánchez Montero fue nombrada presidenta del Consejo de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Castilla-La Mancha a finales de junio de este año, convirtiéndose en la tercera mujer en presidir este órgano en sus casi 20 años de historia.

Su labor como presidenta del colegio regional -y antes del guadalajareño- es cuidar de quienes nos cuidan y, por eso, agradeció de corazón el trabajo que desempeñan todos los farmacéuticos y personas que están alrededor del medicamento; y también al paciente por la confianza depositada en ellos y que hace que «mejoremos cada día».  

En el día de ayer se celebró el Día Internacional del Farmacéutico. Usted lleva poco tiempo como presidenta de este colectivo en Castilla-La Mancha, ¿cómo está siendo esta nueva etapa?

Sí, llevo en el cargo desde finales de junio. Tenemos muchos retos por delante, pero estamos trabajando todas las provincias unidas, con un mismo objetivo y creo que van a salir proyectos interesantes.

Comentaba que tienen muchos retos por delante, ¿cuáles son los más urgentes?

Tenemos reivindicaciones eternas como la de conseguir la comunicación médico-farmacéutico, tanto en Atención Primaria como Hospitalaria. Y, por supuesto, un reto imprescindible para Castilla-la Mancha es ayudar a nuestras farmacias rurales. Ahora mismo tenemos más de 200 farmacias en zonas de menos de 500 habitantes. Nuestra lucha y trabajo es conseguir que estos farmacéuticos que están accesibles todo el día, sin hora, que hacen guardias día y noche y que no pueden conciliar su vida, tengan unas mejores condiciones y puedan mantenerse en estos pueblos.

¿Cómo se pueden mejorar las condiciones de estos farmacéuticos rurales? ¿Todos los municipios de la comunidad autónoma reciben medicamentos?

Ahora mismo estamos llegando al 98,8% de la población, pero queremos llegar al 100%, sobre todo en pueblos donde no hay farmacia, botiquín ni consultorio médico. Estamos trabajando en ello. Tenemos un gran proyecto que hemos presentado a la administración y del que nos vamos a beneficiar todos. Es importante contar con las oficinas de farmacia rurales y ayudarlas económicamente para que se mantengan. Aún así tenemos una distribución que llega al 100% de la región, con furgonetas se salen a pérdidas solo para llevar un medicamento a un solo paciente. El modelo de farmacia rural que tenemos es un ejemplo de cohesión social, equidad y acceso en condiciones de igualdad al medicamento.

 ¿Qué supondría que tuvieran acceso al historial farmacoterapéutico del paciente?

Es importante conocer toda la medicación que toma un paciente, también los medicamentos hospitalarios. Debemos tener un completo del paciente para dar una atención más completa y adecuada.  

¿Qué ocurre para que no se lleve a cabo?

Todo el mundo comprende que son cosas necesarias y hay que hacerlas. Tenemos mucho burocracia por medio, hay que cumplir temas jurídicos y legales. No siempre el acceso, por protección de datos, es fácil, pero estamos trabajando en ello y es algo que, evidentemente, tendrá que llegar. Es necesario que los farmacéuticos se integren de una forma más completa en el sistema sanitario y colaboremos con médicos, enfermeros y farmacéuticos de Atención Primera y Hospitalaria. Vamos a afrontar un futuro complicado de mucha cronicidad y envejecimiento. No se trata de un tema de quitar el trabajo a nadie, sino con el afán de colaboración, de una buena derivación y de un uso adecuado de los recursos sanitarios.

¿Qué está ocurriendo con el desabastecimiento de medicamentos que cada vez es más común?

Es un problema que tenemos desde hace bastante tiempo. No depende de nosotros, ni siquiera es un problema de España, sino del mundo.  

Parece entonces un problema de difícil solución…

Sí, porque son muchos los factores que entran en juego como también las políticas de precios.

La automedicación se está incrementando año tras año. ¿Qué es lo que está fallando?

Trabajamos para hacer un uso racional del medicamento, pero todos sabemos que hay pacientes que acumulan medicamentos en sus casas, sobre todo, gente mayor que no entiende bien su medicación. Nosotros trabajamos a través de lo que se conoce como Sistema Personalizado de Dosificación (SPD), donde hacemos un seguimiento, sobre todo, a pacientes vulnerables, mayores o polimedicados que no se organizan bien con su medicación. Es una forma de hacer un uso racional del medicamento, de ahorrar al sistema, pero a la vez mejora mucho la salud de estos pacientes y su calidad de vida.

Tras la DANA sufrida a comienzos de este mes de septiembre, especialmente en la provincia de Toledo, muchas oficinas de farmacia resultaron dañadas y perdieron buena parte o todo el material farmacéutico que tenían dentro. ¿Sabe si han vuelto a la normalidad?

Desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Castilla-La Mancha, Cofcam, hemos estado en contacto desde el primer momento con el Colegio de Toledo. Me consta, además, que su presidente ha hecho lo imposible y ha ayudado a que se pusieran rápidamente a dar de nuevo servicio. Evidentemente se han puesto en marcha los seguros. Hay algunas farmacias que lo han perdido todo. Ahí estamos para todo lo que necesiten, a través del Colegio de Toledo. Sabemos que casi todos, no todos, están ya en activo. Es verdad que tienen muchas deudas económicas, pero estamos en ello.