La alcaldesa de Yeles, María José Ruiz, está para pocas bromas. No lo disimula. Pero concede alguna carcajada de la pura desesperación. Los bancales de arena de río se suceden en el arroyo Boadilla continuamente; que la CHT limpia el cauce, al día siguiente, regresa el alud que tapa casi por completo el paso del agua.

La CHT limpió el pasado jueves el cauce del arroyo Boadilla, pero las lluvias siguientes taponaron de nuevo de arena el paso a la altura del puente. «Un municipio de 6.000 habitantes no se puede gastar tanto por esa cantidad de arena. Ya está bien», reprocha la alcaldesa por esos aludes de arena que, sospecha, procede de unos desarrollos urbanísticos en el término municipal de Illescas.

«Es grave. Es desesperante», concluye la alcaldesa sagreña sobre la repetición de estos episodios a modo de castigo continuo como en el mito griego de Sísifo. En este sentido, la CHT limpió el lunes de nuevo el cauce del arroyo Boadilla, uno de los dos que cruzan el municipio, junto con el Guatén.

En este sentido, la alcaldesa pide también a la Confederación Hidrográfica del Tajo que investigue el origen de estos bancales de arena de río. Una vez retirados, el Ayuntamiento deposita esta cantidad ingente en la zona del antiguo campo de fútbol.

«Yeles se sigue cegando de arenas y sedimentos de los desarrollos aguas arriba de otros municipios. ¿Recordáis que el 12 de enero de 2024 se limpió el puente del arroyo Boadilla y que solo con las lluvias del 19 del mismo mes se volvía a cegar?», explicaba el lunes el equipo de Gobierno a sus vecinos.

«En Yeles nos preguntamos si ya sabemos de dónde viene todo y lo hemos informado a las distintas administraciones, ¿cuándo alguien se va a hacer cargo de este problema?», pregunta retóricamente el equipo de Gobierno.

El Ayuntamiento había desembolsado miles de euros para limpiar el cauce a principios de enero, y días después, regresó la arena.

Al menos, la CHT ha atendido desde finales de enero las quejas del Ayuntamiento de Yeles sobre la limpieza general de los dos arroyos. La alcaldesa remitió el 1 de diciembre de 2023 una reclamación al organismo de competencia nacional para una intervención urgente que remediara «el riesgo real y efectivo que se está produciendo sobre la vida, la integridad física y bienes de las personas afectadas» en los arroyos Guatén y Boadilla, con un recorrido distinta hasta su confluencia a la altura de Yeles.

La CHT limpiará por completo el arroyo Guatén, desde la salida de la zona urbana del municipio hasta la depuradora de la Mancomunidad de la Sagra Alta, así como el arroyo Boadilla hasta 110 metros antes de la parte canalizada.